En la foto, pareja de gigantes de Calatayud. Foto:JOANA PÉREZ

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La lluvia deslució la VII Trobada de Gegants 2004, circunstancia que no hizo mella en el buen ánimo de las colles participantes. La concentración que debía ser en es Born a las diez y media de la mañana, se tradujo en la reunión de las figuras en la plaza del Rosari, para luego ir hasta el Ajuntament. En el interior del edificio quedaron instaladas y el público pudo admirar las parejas de los Geganters de la Sala, de gigantes de Inca, sa Pobla, Calvià, Alaró, Llucmajor, Manacor, Consell de Mallorca, Vinarós, Alforja (Tarragona), Calatayud (Zaragoza), y cinco unidades de Leganés (Madrid), además desiurel de Marratxí. También participaron 6 figuras de la colla de Nans i gegants.

El refrán «al mal tiempo, buena cara», quedó patente en la improvisada fiesta que armaron los geganters en el zaguán del edificio municipal, donde no faltó la música de los grupos acompañantes y las tonadas de la Escola Municipal de Xeremiers. Ajenos a la lluvia que caía, los más osados bailaron danzas típicas mallorquinas en la plaza de Cort, saliendo a continuación a realizar sus danzas los Gegants de la Sala, los de Vinaròs, espectaculares por sus dimensiones, y los de Calatayud que aportaron el rey moro y la reina mora.

La alcaldesa, Catalina Cirer, acompañada de la regidora María José Frau entregó una placa de recuerdo a los participantes, agradeciéndoles su asistencia, su buen talante y el deseo de verlos el año que viene, aunque eso sí, cursará petición a San Pedro para que haga buen tiempo.

Amalia Estabén