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El conseller de Turisme, Joan Flaquer, indicó ayer en el acto de presentación de la red cicloturista en la Isla, que en la feria Fitur, que será inaugurada por los Reyes este miércoles en el recinto ferial Juan Carlos I de Madrid, se espera que se confirmen las buenas previsiones que hay del mercado nacional para este verano en las Islas, pero dejó claro que el sector hotelero «debe extremar las precauciones para no bajar precios y no caer de forma prematura en las ofertas y descuentos». Flaquer puntualizó que cada vez hay más competencia y la rentabilidad disminuye, «es por ello que el turismo balear debe ser capaz de dimensionar su posición en los mercados emisores y saber defender su precio a través de la calidad del destino. Si se cumplen estos requisitos, puedo augurar una cierta rentabilidad de las empresas de las Islas a corto plazo. Es por ello que se debe extremar la prudencia en todo lo concerniente a los precios. En un mercado cada vez más sensible a las ofertas, no se debe caer de manera prematura en reducciones de precios que no responden en este momento a la realidad del mercado».

En el transcurso de Fitur, el Govern va a incentivar al máximo la promoción de la oferta cultural y deportiva de las Islas, «porque debemos transmitir a los turistas que hay otros encantos a parte del turismo de sol y playa. Es esta estrategia la que vamos a defender en la feria de Fitur». Y en cuanto a los efectos de la Eurocopa y las Olimpiadas, el conseller aclaró: «El impacto negativo no suele conllevar una diferencia significativa en la caída de turistas. La disminución de turistas es evidente, pero estos eventos no deben provocar perder la perspectiva de la situación actual, que es la de recuperar cifras de visitantes. La situación es complicada y difícil, especialmente en los mercados emisores extranjeros por los problemas de imagen habidos».

Respecto a la red de cicloturismo, el director general de Ordenació de la Conselleria de Turisme, Josep Aloy, explicó que se pondrá en marcha este año la primera fase de una red cicloturística de 235 kilómetros en Mallorca, que conectará 17 municipios, «con el objetivo de potenciar el turismo interior, dinamizar el entorno rural y dar a conocer su oferta turística y cultural». Esta primera fase, que cuenta con 1,5 millones de euros de presupuesto, «se inicia con la voluntad de extenderla al resto de Islas. Además, se contará con la colaboración de los distintos pueblos para que los itinerarios, que se desarrollan por caminos rurales de uso público, puedan pasar por cada municipio». Cada año vienen a la Isla unos 70.000 cicloturistas, que generan un millón de estancias hoteleras.