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La coalición Progressistes per les Illes Balears (formada por PSM, Esquerra Unida, Els Verds y ERC) propone en su programa electoral el reconocimiento «con todas sus consecuencias» de las realidad pluricultural y plurilingüística del Estado. Su idea es que el catalán, además del gallego, el catalán y el euskera sean oficiales al igual que el castellano y que puedan ser utilizadas en las Cortes y en todos los organismos del Estado. Según expuso Nanda Ramón (PSM), primera candidata al Congreso, hay que poner en marcha «mecanismos de defensa y de difusión de la realidad plurilingüe del Estado en España y en el extranjero» y que, para ello, las cuatro lenguas deben aparecer en los sellos de correo, en las monedas y en los billetes, así como en los carnés de identidad y pasaportes.

La rueda de prensa, convocada para exponer el programa lingüístico de la coalición, sirvió para enjuiciar las medidas anunciadas por el Govern y que, según Miquel Angel Llauger (Els Verds) son «un globo sonda que constituye una provocación». Llauger, profesor de catalán, tildó de «ridículo» que se pudiera convocar un referéndum en los colegios sobre las clases de catalán y preguntó si «también se consultará como deben enseñarse las matemáticas o el dibujo». También criticó la «provovación» de Fiol a la UIB.

Manuel Cámara (EU), que habla en castellano y que admitió que no utiliza el catalán «por bloqueo o lo que sea», se expresó ayer parcialmente en catalán y dijo que el PP no está defendiendo el bilingüismo y que sólo quiere dividir a la población para arañar votos. «Solo los catalanohablantes como Nanda Ramón, que también se expresan correctamente en castellano, son bilingües. Ese es el verdadero bilingüismo, que todos conozcan las dos lenguas», dijo. Para Joan Lladó (ERC) con las políticas «de rebajas» del PP sólo se logrará «una Mallorca de saldos». Lladó se refería tanto a las «rebajas» de la política lingüística como a las propuestas territoriales del PP y UM.