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La familia Plomer Serra de Muro celebra hoy su fiesta típica de matanzas, una de las más multitudinarias de Mallorca. En su nave industrial se van a reunir de nuevo más de seiscientos invitados, entre familiares, vecinos y los máximos representantes del Partido Popular de Balears, compañeros del político murer. Los preparativos empezaron ayer a las siete de la mañana cuando fueron sacrificados tres cerdos y no dos, como era habitual, debido a que cada año crece el número de comensales. Con la buena disposición que caracteriza a los murers a la hora de trabajar, Onofre Plomer contó de nuevo con su nutrido equipo de hombres y mujeres, dirigidos por Apolonia, esposa de Plomer.

Los cerdos pertenecían a la «ganadería» de Tomeu Sales Valencià y la cuadrilla de matancersestuvo encabezada por ematador Biel Terrasa Terraseta, acompañado por los «subalternos» Rafel Capó, Joan Bestard, Vicenç Martorell; la mozo de espadas Cati Capó y el «ayuda», Joan Pol. A las diez de la mañana se paró para eberenar, y degustaron sobrasada, lomo con salsa y patatas, ensaimadas, café y vino. A medida que iba avanzando el despiece Miquel Femenías y Toni Llull iban picando con la máquina eléctrica la carne magra y grasa para hacer las longanizas y la sobrasada. La tarea de pastar estuvo encomendada a los hombres, mientras que el aliño de especies, estuvo a cargo de Apolonia, que le da ese puntito covent como buena poblera que es.

Al tener mucho material se destinó parte de la mezcla de carnes para elaborar fuet y chorizo, consiguiéndose hasta 120 kilos de charcutería casera de gran calidad y varios kilos de butifarrones. Mientras, las mujeres iban preparando la comida en los grandes fogones dispuestos en la nave, que consistió en sopes i frit de matances, naranjas de Muro y cocovets a rompre. A esta comida asistieron sus más cercanos colaboradores y muchos amigos del municipio. Tras un breve descanso para el café el equipo de cocina continuó su labor preparando la comida de hoy, en la que no faltarán los tradicionales escaldums, al estilo del pueblo, con albóndigas, alcachofas rebozadas, y pollo campero. Todo una delicia.

Amalia Estabén