Matas espera que Zapatero le garantice una mejora de la financiación en sanidad y educación.

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El president del Govern, Jaume Matas, está dispuesto a llegar hasta los tribunales si el Gobierno de Zapatero no da una respuesta a la petición de Balears para mejorar la financiación en sanidad y educación. En declaraciones realizadas a este periódico, Matas recalcó que su gabinete planteará una negociación «desde el espíritu de la colaboración», pero avisó: «Yo anuncié que la mejora de la financiación en sanidad y educación sería la gran batalla política de la legislatura y estamos tan convencidos de la legitimidad de nuestra reclamación y del rigor de la propuesta, que espero que no sea necesario llevarla ante los tribunales. Vamos a mantener la negociación política, pero llegaremos hasta donde haga falta».

El Govern está a la expectativa de la postura que adoptará el Gobierno central ante la reclamación para mejorar la financiación de sanidad y educación, pero los primeros contactos no son demasiado esperanzadoreas de cara a los intereses de Balears. El Ejecutivo de Matas recibió un auténtico jarro de agua fria cuando el vicepresidente económico, Pedro Solbes, dió escasas esperanzas a Balears para incrementar su financiación. Sin embargo, el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, había prometido al propio president Matas que se cumpliría la ley de financiación, que contempla la posibilidad de revisiones en casos puntuales.

En concreto, Balears tiene un incremento de población escolar superior a la media nacional y por ello puede exigir una mejora de la financiación. Además, la Comunitat también está en condiciones de solicitar una mejora económica para compensar el incremento de la población no residente que debe ser atendida en los centros sanitarios de Balears. La actual ley de financiación contempla en uno de sus artículos la posibilidad de mejorar las partidas económicas a las comunidades que cumplen estos requisitos, un argumento que el Govern de Matas podría utilizar ante los tribunales en caso de que las vías políticas se agoten. El Ejecutivo podría presentar un recurso ante el Tribunal Supremo.