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El Ajuntament de Palma y la Cámbra de Comerç i Indústria de Mallorca, Eivissa i Formentera firmaron ayer un convenio para impulsar el sector naútico y marítimo de Palma, un sector donde actualmente trabajan 1.500 personas, 900 de las cuales son de nacionalidad extranjera. El convenio, firmado entre Catalina Cirer, alcaldesa de Palma, y Miquel Lladó, presidente de la Cambra, incluye la implantación de iniciativas relacionadas con la orientación profesional, la intermediación laboral, la promoción empresarial y la mejora de la calidad de los servicios turísticos y de la información especializada.

Según afirmó Cirer, «el sector náutico se enfrenta a grandes retos de futuro, como son la profesionalización de los trabajadores, y el control de las exigencias ambientales y de los servicios. Es un ámbito de oportunidad empresarial y nos puede ayudar a un turismo sostenible y estacional». El Ajuntament de Palma ha creado una bolsa de trabajadores (profesionales o no), que tienen interés en trabajar en el sector naútico. «Más de 1.500 personas ya se han apuntado. Los hay que son profesionales y quienes recibirán unos cursos para formarse», afirma Sebastià Sansó, concejal de Trabajo.

Por su parte, Miquel Lladó destacó la importancia de este convenio y subrayó que durante los últimos años el turismo náutico ha experimentado en las Islas crecimientos de cerca del 2,5 por ciento en número de turistas y un alza del 7,3 por ciento en facturación. «En Balears hay 60 puertos deportivos y existen 18.852 puestos de amarre. Cada año se producen cerca de 53.000 movimientos de embarcaciones, lo que supone la llegada de unos 212.000 turistas», afirmó Lladó.