J. L. Ruiz Collado13/10/04 0:00
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La Conselleria de Turisme va a elaborar una serie de normas de calidad para regular la actividad del «todo incluido» en la oferta de alojamiento turístico de las Islas. Esta medida se llevará a cabo ante el crecimiento de esta modalidad y la decisión de algunos touroperadores, entre ellos el grupo TUI, de eliminar de sus folletos hoteles de «todo incluido» de Mallorca por las quejas que han recibido este verano. El conseller de Turisme, Joan Flaquer, afirma que con estas normas de calidad, «que no estarán englobadas en ni una orden ni decreto del Govern, se pretende fijar unos mínimos de calidad. Mediante unas auditorías los hoteles podrán obtener el certificado de la Conselleria de Turisme de que sí cumplen los mínimos de calidad que hay que exigir a esta modalidad turística. Queremos que toda la oferta de todo incluido se someta a estas auditorías para obtener la certificación».

Flaquer añade que el crecimiento de esta oferta, que no supera el diez por ciento de la planta hotelera, pero sí el 15 por ciento en cuanto al número de plazas, «tiene que satisfacer la demanda turística y no crear mala imagen por no dar los servicios hoteleros que se requieren y que demandan los turistas cuando contratan un paquete turístico bajo esta modalidad». En la última reunión de la Mesa del Diálogo Social ya se puso encima de la mesa esta iniciativa, pero la patronal CAEB, presionada por la Federación Hotelera de Mallorca se mostró contraria a establecer cualquier tipo de normativa reguladora del «todo incluido», por entender que el mercado es el que debe marcar las pautas de comportamiento. Los servicios técnicos de la Conselleria de Turisme están, en este sentido, perfilando los criterios de calidad mínimos que debe cumplir esta oferta de alojamiento, tanto en lo que concierne a los servicios de cocina, comedor, lúdicos y deportivos y de mantenimiento y limpieza.

Durante este verano han operado en Mallorca unos 130 hoteles bajo el «todo incluido», que han sumado en su totalidad más de 52.000 plazas de alojamiento, el 18,6 por ciento del total de camas existentes en la Isla. Y para el próximo verano, visto los buenos resultados obtenidos, tanto por parte de los hoteleros como de los touroperadores, el crecimiento respecto a este verano será también sustancial, aunque en menor medida del que hubo respecto a 2003, que fue del 87,5 por ciento (70 hoteles en el verano de 2003). Esta evolución al alza, es lo que preocupa al Govern, de ahí la imposición de estos criterios mínimos de calidad.