Durante el debate, Salom defendió que el alto coste de los
billetes aéreos es un agravio comparativo que perjudica a los
ciudadanos de Balears y recordó que las comunidades peninsulares
utilizan la red de RENFE que también financian los ciudadanos de
las Islas. Salom recalcó que los socialistas habían prometido en
campaña electoral incrementar el descuento aéreo hasta el 50 por
ciento, una propuesta que sí tuvo el apoyo unánime en una votación
en el Parlament balear. Desde el PSOE, la diputada Gloria Rivero
subrayó que «Zapatero se ha comprometido a subir los descuentos del
33 al 38 por ciento en enero de 2005». «Es sorprendente que el PP
descubra ahora los problemas de Balears y Canarias después de ocho
años de inmovilismo», dijo la diputada.
Antes de comenzar a discutir la propuesta del PP, los
socialistas presentaron una enmienda que proponía aplicar ya el
descuento de residente del 38 por ciento a partir de enero de 2005,
y llegar hasta el 50 por ciento de forma gradual hasta el año 2008.
A partir de ese ejercicio, el Ministerio de Fomento se comprometía
a financiar el 50 por ciento del precio del billete. El Gobierno de
Zapatero alega problemas presupuestarios para cumplir su promesa
electoral en 2005. Coalición Canaria también presentó una enmienda
similar a la de los socialistas, aunque los nacionalistas exigían
que el descuento del 50 por ciento se aplicase en 2007, y no en
2008. Salom no aceptó ninguna de estas enmiendas y el Congreso votó
el texto original presentado por el PP. Los portavoces del resto de
grupos coincidieron en la necesidad de aumentar los descuentos para
residentes, aunque fue Coalición Canaria el grupo parlamentario que
asumió que el 33 por ciento de bonificación es insuficiente. Esta
formación nacionalista espera que Zapatero cumpla su promesa de
alcanzar el 50% esta legislatura.
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