El proyecto de Ley para la Conservación de los Espacios Naturales
de Relevancia Ambiental (LECO), aprobado el viernes en Consell de
Govern y pendiente de tramitación en el Parlament, establece que la
declaración de parques naturales, parajes naturales y reservas
naturales deberá ser aprobada mediante una Ley cuando los terrenos
sean privados y los propietarios de más del 50 por ciento de la
superficie rechacen esa declaración, según anunció ayer el
conseller de Medi Ambient, Jaume Font.
Por el contrario, la declaración de monumentos naturales,
paisajes protegidos y áreas de interés científico, además de las
figuras anteriormente citadas cuando se trate de terrenos de
titularidad pública o aportados voluntariamente por los
propietarios de más de la mitad de la superficie a proteger, podrán
ser declarados vía acuerdo del Consell de Govern.
«Desaparece la imposición y el decretazo, y el Govern estará
obligado a hablar con los propietarios antes de tomar cualquier
decisión» afirmó el Jaume Font, quien destacó que el proyecto de
Ley tiene como objetivo conseguir un «equilibrio entre el interés
público y el privado, asumiendo la administración un papel de tutor
de la conservación del entorno y mediador entre los sectores
implicados».
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