La recaudación será reinvertida en la mejora medioambiental de
Balears y el dinero que se ingrese irá directamente a la fundación,
según han explicado los representantes del Govern en las reuniones
que ha mantenido durante las últimas semanas con las distintas
patronales hoteleras.El Govern comenzará a vender la «tarjeta
verde» a turistas y residentes a partir del 1 de abril en
aeropuertos, hoteles, empresas de rent a car y a través de guías
turísticos.
Este es el plan que ha diseñado la Conselleria de Turisme para
lanzar un producto que será ofrecido a los turistas a un precio
módico con la intención de destinar los ingresos a financiar la
Fundació per el Desenvolupament Sostenible de Balears. La
recaudación será reinvertida en la mejora medioambiental de Balears
y el dinero que se ingrese irá directamente a la fundación, según
han explicado los representantes del Govern en las reuniones que ha
mantenido durante las últimas semanas con las distintas patronales
hoteleras.
La «tarjeta verde» tendrá un precio diferente para turistas y
residentes. En el caso de los turistas, el precio será más bajo ya
que el nuevo producto sólo podrá utilizarse durante un tiempo
limitado. Cuando un turista compre la «tarjeta verde» podrá
recuperar el dinero invertido con los descuentos que contempla este
producto. Es decir, un turistas tendrá bonificaciones en los
precios de museos, en el bus-turístico, en campos de golf,
etcétera, y el dinero que pague lo recuperará en función del uso
que haga de la tarjeta. Cuanto más lo use, antes recuperará el
precio que haya pagado por el nuevo producto. En el caso de los
residentes, la «tarjeta verde» será más cara ya que podrá
utilizarse durante todo el año.
La intención de la Conselleria de Turisme es aprovechar la cita
de Fitur de Madrid, prevista para el mes de enero, para presentar
todos los detalles de la «tarjeta verde», con información sobre el
coste y los posibles ingresos que se generarán en este primer año.
Las empresas y particulares que vendan la «tarjeta verde» recibirán
una pequeña comisión y el objetivo del Govern es ampliar el número
de entidades y particulares colaboradores en futuras temporada
turísticas. La «tarjeta verde», según la filosofía que quiere
aplicar el Govern, tendrá un efecto recaudatorio, pero sin
imposiciones, y permitirá potenciar el consumo de los turistas que
visiten Balears. Cuantas más empresas colaboren, más opciones
tendrán los turistas de recuperar el dinero que hayan
invertido.
Pero uno de los aspectos importantes de la campaña de
lanzamiento de la «tarjeta verde» será explicar con claridad su
utilización. El Govern quiere dejar muy claro que el dinero que se
recaude servirá para contribuir a la mejora del medio ambiente.
Flaquer explicará en Fitur las cifras económicas del primer año de
aplicación de la «tarjeta verde».
Paralelamente a los ingresos que generen la «tarjeta verde», la
Fundació per el Desenvolupament Sostenible de Balears también podrá
a la venta productos propios con la intención de recaudar más
dinero. Entre algunos productos, las patronales hoteleras se han
comprometido a convencer a sus asociados para que todos los
productos de baño que utilicen -toallas, gorros, albornoces,
etcétera- sean adquiridos a la Fundació per el Desenvolupament
Sostenible de Balears. También se venderán en abril.
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