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El frío matutino de ayer no amedrentó a los consumidores, que desde primeras horas de la mañana se daban cita en el Mercat del Olivar para realizar sus compras de Nochevieja y Año Nuevo.

En primer lugar llamó la atención la gran cantidad de gente que aguantó largas colas, concretamente en la charcutería Creus, para hacerse con las bandejas de delicados fiambres, huevo hilado y jamón serrano e ibérico, uno de los más solicitados.

Otro producto muy solicitado fueron las uvas, que se encontraban en abundancia, y que a medida que transcurría la mañana, tal cual la Bolsa, iban cambiando su precio. Hasta las diez de la mañana la variedad alicantina aledo, marcaba un precio que oscilaba entre los 2,25 y 2,40 euros kilo. Luego empezó a oscilar en algunos puestos llegando a coger un precio de 1,95 y 2,00 euros kilo.

El frutero Miquel Gelabert señaló que «el precio de la uva se mantendrá hasta hoy. Está a buen precio y la gente lo compra fresco en detrimento del práctico que se ofrece en bote de conserva por aquello de que es más tradicional. En el puesto de Ismael Cuenca, su titular destacó que el más caro es emoscate, que cuesta a 3,45 euros kilo, y la variedad dominga, se cotiza entre los 1,95 y los 2,00 euros kilo. Este año la uva, en lugar de subir su precio, éste se ha mantenido, e incluso, ha bajado un poco».

Pescadería
La afluencia de público se hizo notar en la pescadería. El marisco, en cantidad muy solicitado debido a la fecha de la cena de San Silvestre y menos pescado y, sobre todo, gamba fresca mallorquina, debido al mal tiempo. Ésta, según tamaño, se cotizaba entre los 49 y los 120 euros kilo, pudiendo hoy llegar a cotizarse a 160 euros kilo. El pescadero Miquel Àngel Covas señaló que «hay poca gamba pues el viento ha impedido poder llegar a sa pesquera, en Andratx».

En Pescados Tolo indicaron que «las piezas de marisco más solicitadas en esta fecha concreta de Fin de Año son los bogavantes, nécoras, y centollo. Luego las escupiñas y mejillón, cuyo precio tiende a mantenerse o a subir ligeramente. De todas formas, la gente compra más marisco que pescado».

El bogavante vivo de Canadá cuesta 27,00 euros kilo; el centollo de Escocia, 17,40; las escupiñas, 24,85; la almeja de Pontevedra, 15,75; el buey de mar de Escocia a 17,40 y las nécoras a 47 euros kilo. El bogavante vivo gallego se cotizaba ayer en Pescados Bauzá Jiménez a 51 euros kilo y el de Canadá, en oferta, a 19,00 euros kilo.

El precio de la langosta de Túnez oscila, según tamaño, entre los 51,00 y los 79 euros kilo. Los escarametlans grandes situaban su precio entre los 73 y los 83 euros kilo.

La canailla cuesta 20,75 euros kilo; el berberecho, 14,40, y las vieiras a 20,79 euros kilo.

Los consumidores que lo celebran en sus casas tras hacerse con los fiambres o el marisco remataron la faena comprando una buena carne. En la carnicería Can Toni, Francisco Algaba y Toni Sureda destacaron que «para Nochevieja la gente cambia el pavo y la lechona por la ternera, que en nuestro establecimiento la tenemos mallorquina cebada a base de cereales. El precio del redondo de ternera cuesta 12,60 euros kilo; el solomillo, 29,95; la sombra del brazo, atada tipo redondo, a 11,12, y el chuletón a 13,96 euros.

Amalia Estabén
(texto y fotos)