«Acción Católica surge como una forma de mantener el control social»

En la presentación intervendrán Sebastià Serra, profesor de Historia Contemporánea de la UIB; Jaume Oliver, profesor de Pedagogia de la UIB y Josep Estelrich Costa, prévere.

El libro recoge la tesis doctoral de Matas, en la que ha trabajado durante ocho largos años. El autor ha tenido que documentarse a conciencia, consultando repetidamente el archivo de Acción Católica en Mallorca.

«Esta organización surge a partir del año 1931 como una forma de mantener la jerarquía católica del control social. Los poderes económicos, la aristocracia y el clero, se plantean volver a recuperar el control del espacio, sin perder la hegemonía. De una forma u otra, se sienten amenazados por los postulados de II República y comienzan a organizarse. Será después de la Guerra Civil que su influencia eclosione, en una sociedad ya profundamente conservadora. La primera junta directiva de Acción Católica estaba integrada por notarios, médicos y aristócratas», asegura Matas.

El historiador dice que «Acción Católica se declaraba apolítica, quiere mantener un factor de diferenciación respecto a las otras organizaciones del franquismo, como por ejemplo el Frente de Juventudes. Sin embargo, sólo hubo fricciones puntuales, ya que ambas organizaciones estaban en el mismo espectro ideológico. Se cuenta en el libro como, en Felanitx, Pere Esterich tuvo que mediar entre las juventudes afines al régimen y la gente de la parroquia».

El libro, que contiene algunas fotos y numerosas ilustraciones, presenta también un listado de personalidades mallorquinas vinculadas a este movimimiento. «En los tiempos de la posguerra hubo gente que desempeñó cargos de responsabilidad, como Andreu Buades, que fue durante un tiempo presidente de la unión diocesana de acción católica. O el profesor Josep Font i Trias, de la asociación católica de propagandista, o Toni Sabater i Mut, secretario de propaganda de unión diocesana de hombres».