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La propuesta inicial del Govern de Balears de vincular la reforma del Estatut d'Autonomia de las Islas, avanzada por el president Matas en el «debate de la Comunitat» del pasado año (y de la que se fue desdiciendo hasta defender exactamente lo contrario), no tiene futuro y, desde luego, no contará con el apoyo de los socialistas de las Islas ni tampoco con el del Gobierno de Zapatero. Aunque no será hasta hoy cuando los socialistas de las Islas presenten las líneas generales de su propuesta estatutaria, el secretario general del PSIB, Francesc Antich, ya avanzó ayer que el modelo de financiación quedará fuera del debate estatutario.

Antich, en una rueda de prensa convocada inicialmente para valorar el «debate de la Nación» celebrado esta semana en el Congreso, señaló que la financiación será una negociación de «todas las comunidades» con el Gobierno central ya que, de otro modo, «se llegaría al absurdo». Antich, diputado socialista por Balears, insistió en que el presidente Rodríguez Zapatero tiene «muy claras» las reclamaciones de Balears y consideró «algo anecdótico, la anécdota del debate» que el presidente citara a las Islas tras un comentario de la diputada popular María Salom desde su escaño.

Antich añadió que el nuevo sistema de financiación, objeto de un debate en la próxima reunión de la Conferencia de Presidentes, recogerá reclamaciones «históricas» de Balears como el aumento de la población, compensaciones por la insularidad, «el hecho diferencial de las Islas», y mayor participación en la gestión de los impuestos estatales. Donde sí estuvo muy claro Antich fue a la hora de rechazar que el debate sobre la reforma estatutaria se vincule a la financiación y, sobre todo, al descartar que el futuro texto recogiera el Concierto Económico, como reclaman tanto UM, ERC y PSM.