Los talleres del patio de La Misericórdia fueron muy seguidos por los pequeños.

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La II Feria de Cultura Popular de raíz tradicional vivió ayer su tercera y última jornada con una serie de actividades que se iniciaron a las 10.00 horas y se prolongaron hasta pasada la medianoche aportando a un sábado en Palma un paseo por la cultura mallorquina.

Desde primera hora de la mañana los ciudadanos recordaron la celebración en el patio del Centre Cultural de la Misericòrdia con la plantada de gigantes de toda Mallorca en la Plaça Major, donde también pudo observarse el globo aerostático de «Infomallorca.net», inaugurado el pasado viernes en Manacor, subiendo y bajando a los interesado a un mirador privilegiado de la ciudad.

Mientras tanto, el patio iniciaba su jornada más intensa con la apertura del recinto ferial. En él podían visitarse los stands, expositores y puestos de un buen número de escuelas y asociaciones dedicadas a la conservación del patrimonio cultural y festivo.

Al mismo tiempo se iniciaron los talleres, mayoritariamente en la fabricación de instrumentos típicos, como las xeremies, las percusiones, los fabiols o las ximbombes. Pero también de títeres, glosats y cabezudos.

Mañana y tarde, los visitantes de la feria pudieron disfrutar también de dos exposiciones: una dedicada a danzas rituales, y una de fotografía de fiestas mallorquinas. Asimismo, desde la mañana, y en los dos escenarios que se instalaron en el patio, las actuaciones musicales se sucedieron durante todo el día. Durante la tarde ofrecieron su música los Balladors de Lluc, Tracalada, Revetlers, Tacaritx, Estol del Gerricó, Tramundança, Nuestra Música y Quart Creixent.

Muchos fueron los mallorquines que acudieron a la cita presentada por el Consell de Mallorca con un doble objetivo, por una parte conservar las raíces, y por otra, mostrar a los nuevos habitantes de la Isla las tradiciones de Mallorca.

J.C. / Joana Pérez