Quienes fueron ayer a misa de una, a la Seu, se encontraron a Jaume
Santandreu junto a las pedigueños de la Porta de l'Almoina. Jaume,
con dos inquilinos de Can Gazà, y en compañía del editor Lleonard
Muntaner, instaló un tenderete y se puso a vender «La segona mort»,
una obra de teatro prologada por el canónigo de los pobres, presos
y desarraigados Llorenç Tous, quien precisamente a esa misma hora
-una del mediodía- decía la misa en la capilla central, antes de
iniciarla recomendó la lectura de dicho libro.
Jaume, que desde hace tres años no asistía a misa como oyente,
sentado en el primer banco, y antes de que diera comienzo ésta, nos
comentó que en «La segona mort», obra representada en la víspera en
el teatro municipal de Manacor, Cristo regresa a la Tierra después
de 2.000 años, reencontrándose en ella con la Virgen, la Verónica,
Judas, San Pedro, San Juan el Evangelista y María Magdalena, a
quienes escucha y con quienes discute, a la vez que ellos discuten
y se hacen algún que otro reproche. «La segona mort» es una
crítica, no a la Iglesia en general, sino mas bien a su jeraquía,
al poder que tiene.
El balance de las ventas no fue malo, sino todo lo contrario,
pues vendieron más libros de los que pensaban, a ocho euros unidad.
El importe irá a la causa de los enfermos de sida terminales, con
los que Jaume está muy comprometido, «aunque también lo estoy con
los loquitos, que como no los quiere nadie, ni yo, por falta de
medios, los puedo atender, viven abandonados, en la calle»
Pedro Prieto
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