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Balears y Argentina consiguieron superar ayer la barrera del Atlántico con la ayuda de las nuevas tecnologías. En una noche con las emociones a flor de piel, Jaume Matas presidió desde Palma los actos de celebración del centenario de la Casa Balear en Buenos Aires gracias a una conexión televisiva entre Palma y la capital argentina que arrancó a las 11.30 de la noche (6.30 de la tarde en Argentina) y se prolongó hasta pasada la una de la madrugada. La Casa de Buenos Aires y el hotel Valparaíso, en Palma, se convirtieron en sendos platós televisivos que acercaron hasta las Islas a muchos ciudadanos de Balears que se vieron obligados a emigrar a América.

En un discurso ante los más de 200 congregados en Palma y ante una abarrotada Casa Balear en Buenos Aires, el president del Govern, Jaume Matas, afirmó que «para mí es un día de felicitación y reconocimiento a todo lo que ha sucedido en estos 100 años de la Casa Balear en Buenos Aires», y destacó la acogida que tuvieron los baleares cuando tuvieron que emigrar a Argentina y el papel que desempeñan las casas de Balears para aglutinar ese sentimiento.

Con anterioridad a la intervención del president del Govern, desde la Casa Balear de Buenos Aires tomó la palabra el presidente del centro, Juan Marí, que agradeció la labor desarrollada por el Govern balear. Desde Argentina intervino también la consellera de Presidència, Rosa Puig, presente en los actos del centenario. La vicepresidenta del Govern, Rosa Estaràs, cerró los discursos antes de la intervención del president.

Encuentro familiar
Tras la salutación de las autoridades presentes a uno y otro lado del Atlántico llegó el momento más emotivo de la noche. José Oyaregui, residente en Argentina, y su hermana Montserrat Oyaregui, vecina de Palma, pudieron hablar y, sobre todo, pudieron verse en persona y en directo, algo que no había sido posible en los últimos 50 años. El encuentro resultó muy emocionante, hasta el punto que muchos de los asistente no pudieron contener las lágrimas.

Las conexiones familiares se repitieron hasta en siete ocasiones más. Tras el turno de los hermanos Oyaregui, las nuevas tecnologías posibilitaron el reencuentro entre Francisco Payeras, Andrés Coll y Catalina Coll, residentes en Argentina, con Teresa Coll y Francisca Coll, que viven en Palma.

La familia argentina formada por Vilma Suau, Nieves Suau y Victoria Varra pudieron conectar en Palma con Antonio Suau. También Jimena Ferral pudo hablar con Diego Ferral, quien vive en las Islas. La quinta conexión entre Palma y Bueno Aires permitió que Mercedes, Ricardo y Juan Marí pudieran hablar con Antònia y Francisca Marí. La última conexión con ciudadanos argentinos permitió el reencuentro de Ramona Pons, Delia Infante e Isolina Infante con Damià Pons, y Miquel Pons Infante, sus familiares en Palma.

A pesar de que estas eran las conexiones previstas, aún hubo un último momento para la sorpresa ya que se pudo realizar una conexión entre un grupo de habitantes de Valldemossa y la presidenta de la Casa Balear en Montevideo (Uruguay) que se encontraba en la sede de Buenos Aires.

De hecho, a la fiesta que se celebró en la principal casa balear de Argentina acudieron representantes de todas las casas que existen en América, así como el embajador de España en Argentina. La Casa Balear de Buenos Aires había invitado a esta fiesta a todos los miembros del Govern, a los representantes de los tres consells insulars y a los alcaldes de todos los municipios de Mallorca. Respondiendo a esta invitación, en la sede argentina se encontraban, además de la consellera Rosa Puig, el president del Consell Insular de Eivissa i Formentera, Pere Palau, y el alcalde de Son Servera, Damià Ripoll.

En Palma, además de Matas y Estaràs, estuvieron presentes el conseller d'Educació, Francesc Fiol; la concejala Acció Social del Ajuntament de Palma, Margalida Ferrando; el president de s'Institut, Antoni Serra; el director general de Relacions Institucionals, Antoni Contestí; la alcaldesa de Felanitx, Catalina Soler; el alcalde de Santanyí, Miquel Vidal; el de Llubí, Tomàs Campaner; el de Valldemossa, Joan Muntaner, y el de Formentera, Isidro Torres. También habían sido invitados representantes en Balears de las casas regionales de otras comunidades. Durante toda la noche, hasta pasada la una de la madrugada, se combinaron las conexiones entre las familias de Balears y Argentina con actuaciones musicales. En Palma contaron Tomeu y Genia, de Els Valldemossa, y una pareja interpretó un tango. En Argentina hubo ball de bot y un homenaje a Mario Lozano y Benito Burguera, dos de los representantes más veteranos de la Casa Balear en Argentina.