TW
0

La ausencia de Dolça Mulet, que se encontraba de viaje, en la comisión informativa celebrada ayer en el Consell impidió la aprobación de la ampliación de la incineradora ya que PP y UM no tenían los votos suficientes para que el punto se incluyera en el orden del día por el procedimiento de urgencia. A pesar de este varapalo inicial, el conseller de Cooperación Local y Residus, Miquel Riera, anunció que el plan se llevará al pleno del 3 de octubre por el procedimiento de urgencia. La próxima semana se reúne la comisión de política territorial para aprobar el nuevo plan director, que implica la ampliación de la incineradora.

El GOB y Greenpeace enviaron ayer sendos comunicados en los que censuran la decisión de ampliar la incineradora. El GOB la consideró «una barbaridad, tanto desde el punto de vista económica como ambiental». El GOB considera que antes de modificar el plan debe garantizarse el cumplimiento del actual, que presenta un grado de ejecución muy bajo.

Greenpeace denuncia «el absoluto secretismo con el que UM y el PP modificarán el Plan Director de Residuos con el objetivo principal de ampliar la planta de incineradora de Son Reus» con dos nuevos hornos y tacha esta decisión de «golpe mortal al reciclaje».

El director ejecutivo de la asociación ecologista, Juan López de Uralde, señala que la «falta de transparencia» con la que actúan el partido que gobierna en Consell y el grupo mayoritario que le respalda «pone en evidencia que saben que están haciéndolo mal y que su decisión no cuenta con el respaldo social».

El PSOE se abstuvo ayer en la comisión, lo que impidió que la propuesta del gobierno insular saliera adelante. Los socialistas se reunieron para fijar su postura en este asunto y anunciaron que su voto estará ligado a una propuesta alternativa que presentarán la próxima semana. Tanto el PSM como EU-EV denunciaron ayer tanto el método empleado por el Consell para aprobar la modificación del plan como el fondo del asunto.