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E.P./P.C.
La multinacional Warner ha mostrado su interés en comprar las 20 salas de cine con que cuenta la firma AMC en el centro comercial Festival Park, en Marratxí, que ha anunciado su intención de vender todo su negocio europeo, formado por 148 salas, de las que 86 están en España, por un precio de venta que oscilará entre los 18 y 25 millones de euros en los negocios de la empresa en la Península Ibérica (incluido Portugal) y Mallorca. Entre las diferentes ofertas emitidas por compañías con importante implantación en el sector, como Yelmo Cineplex, Àbaco, Kinépolis y Cinesa-Warner, es esta última la que ha mostrado más interés por las salas mallorquinas.

En Europa, AMC cuenta con ocho grandes macrocomplejos, de los que cuatro están situados en España (uno en Madrid, con 24 salas; dos en Barcelona, con 42 salas; y uno en Palma, con 20 salas), uno en Portugal (Oporto, con 20 salas), dos en el Reino Unido (Birmingham y Manchester, con 12 y 16 salas respectivamente) y otro en Francia, con catorce pantallas.

El centro comercial Festival Park fue adquirido hace cinco meses por el fondo de inversiones australiano APN Funds Management Limited (APNFM).

Los cines de AMC son de los que cuentan con más afluencia de público en Mallorca, pero cuenta al mismo tiempo con una estructura de costes fijos muy elevados, debido sobre todo a que la compañía paga precios de alquiler muy altos, lo que provoca que algunas áreas de negocio de la empresa estén en números rojos. Por ello, la empresa tuvo que despedir al 40% de la plantilla el pasado verano. Además, la baja afluencia de público de lunes a viernes ha reducido en un 12% el importe de las recaudaciones. La mayoría del público que acude al cine son jóvenes, pero no se pueden desplazar hasta Marratxí en sus ciclomotores. Los expertos señalan que no se descarta que incluso algún empresario mallorquín pueda hacerse con las salas de Festival Park.