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J.J. DÍAZ
La decisión de Cort de retirar las tres guías informativas sobre sexualidad no sólo ha levantado diversas opiniones entre los especialistas y otros colectivos. Tanto unos como otros no han tardado en valorar las polémicas guías de diferente manera pero con algo en común, la necesidad de que exista una información sexual adecuada para los jóvenes.

El Colegio de Psicólogos también quiso tomar una postura. Para ellos, las guías son «un instrumento de trabajo y no una campaña abierta de consignas de sensibilización y de lo que hay que hacer». Para Julián Baltasar, decano de este colegio, «las frases que vienen en las guías se han sacado de contexto. No se hacen sugerencias, lo que sí hacen es acercarse al máximo al tipo de vocabulario que maneja la juventud». Este colectivo ya ha pedido una reunión urgente con Cort para expresarle su opinión.

En el ámbito profesional, Mariano Rosselló, director del Centro de Urología, Andrología y Sexología de la Clínica Rotger, confesó «alegrarse» de la retirada de las guías, a las que consideró una «publicación inadecuada e inapropiada para jóvenes de entre 15 y 20 años». Rosselló apuntó que los conceptos que salen en ellas están «mal explicados», aunque recordó la «necesidad de que exista más información sexual en los colegios y en las universidades». Para este doctor, «Cort admite que ha cometido un error en el momento que las retira».

José Vázquez, director de la Clínica Capistrano (centro especializado en adicciones como el sexo), apuntó que «la educación sexual es muy importante, que un ayuntamiento se preocupe de estos aspectos es loable», aunque también matizó que «lo más lógico hubiese sido que las editaran las administraciones educativas». Sobre su contenido dijo que es «demasiado general», mientras que sobre la franja de edades (de 15 a 35), resaltó que es «demasiado amplia».