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El portavoz del PP balear, Miquel Ramis, pidió ayer al delegado del Gobierno en Balears, Ramón Socías, que dimita de su cargo «si no sabe estar a la altura de la institución que representa». Ramis hizo estas declaraciones a propósito del discurso pronunciado por Socías en el acto del Día de la Constitución en el que tachó de «salvapatrias» a los dirigentes del PP balear por su postura en contra del Estatut de Catalunya. Ramis cree que Socías hizo un discurso «fuera de lugar ya que se olvidó que estaba en un acto institución y representando a una institución». El portavoz del PP considera que el delegado del Gobierno «es el brazo armado del PSOE en Balears y traiciona a los ciudadanos al anteponer los intereses partidistas de su grupo». Ramis entiende que el delegado del Gobierno debe ser la correa de transmisión entre las administraciones central y autonómica «e intentar que las cosas funcionen». Según el PP, parecía que las relaciones entre el Gobierno central y el Govern se normalizarían tras la última reunión entre Zapatero y Matas. Sin embargo, Ramis opina que discursos como el de Socías «no ayudan mucho a mejorar las relaciones». Ramis subrayó que Socías ejerce «un cargo absolutamente institucional que consiste en hacer de correa de transmisión entre el Gobierno y el Govern». En cambio, desde el punto de vista del portavoz del PP, el delegado del Gobierno genera «crispación» y «obstáculos» entre los dos ejecutivos, con lo que se convierte en un «instrumento político» y «hace un flaco favor» a los ciudadanos. Además, el Gobierno central utiliza palabras «altisonantes» para demostrar su «talante», pero «a la hora de la verdad» crea «crispación» y busca «confrontación donde no hay», añadió Ramis.