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La Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital de Son Dureta ha cumplido sus primeros 30 años de actividad, en los que ha atendido a alrededor de 36.000 pacientes críticos, con un índice de supervivencia de aproximadamente el 80 por ciento, lo que ha supuesto salvar a unas 29.000 ciudadanos de las Islas.

El Servicio de Medicina Intensiva de Son Dureta cuenta actualmente con 30 camas distribuidas en diferentes unidades de críticos que ofrecen tratamiento y monitorización a los enfermos críticos adultos de diferentes patologías, entre las más frecuentes destacan las enfermedades coronarias, respiratorias, neurológicas, la sepsis, los traumatismos craneales y los operados de cirugía cardíaca.

Así lo explicó ayer el jefe del Servicio de Medicina Intensiva de Son Dureta, Jordi Ibáñez, acompañado del gerente del hospital, Carles Ricci en un acto organizado para conmemorar el 30 aniversario de la UCI.

Durante el año 2005 se trataron unos 1.300 enfermos y la supervivencia fue del 80 por ciento. El 50 por ciento de los enfermos de la UCI tienen menos de 60 años.