El president del Govern, Jaume Matas, propuso ayer por sorpresa incluir en el Estatut una referencia sobre el nuevo Régimen Especial de Balears, un texto que todavía no ha sido aprobado ni remitido al Parlament. La socialista Francina Armengol calificó de «fantasma» la propuesta de Matas, que se hizo pública media hora antes de que el president se reuniese con todos los portavoces parlamentarios para pactar las enmiendas del Estatut.
Matas justificó que la inclusión del nuevo REB en el Estatut comprometería al Parlament y al Congreso de los Diputados a «sancionar» una ley que pretende mejorar la actual. Según Matas, el objetivo es introducir «un mandato general» que elimine en el futuro la discrecionalidad que ha impedido el desarrollo del actual Régimen Especial. Armengol mostró su escepticismo ante esta nueva propuesta y lamentó que se haya planteado poco antes de negociar con todos los grupos parlamentarios las enmiendas del Estatut. Es, en su opinión, «una propuesta insólita y desleal». La vicepresidenta del Govern, Rosa Estarás, matizó que el «comité de sabios» se había manifestado en la misma línea defendida por Matas y dijo que la enmienda que introduciría el PP «es negociable». Al margen del REB, Armengol insistió en que todavía se está muy lejos de alcanzar un acuerdo para aprobar por unanimidad el Estatut. La portavoz socialista espera que el texto estatutario incluya la carta de derechos y deberes, que defina las competencias de la Comunitat, el poder judicial y la financiación. Armengol dejó claro que el PSOE no está de acuerdo con la propuesta de poner en el Estatut la cifra de 3.000 millones, que es la cantidad que reclama el PP para compensar el déficit histórico de Balears. Armengol presentará hoy una enmienda que suprima una referencia concreta a los 3.000 millones que reclama el PP. La diputada socialista recordó que Esquerra Republicana de Catalunya hizo una propuesta similar que no llegó a prosperar. Sobre este mismo asunto, el PP quiere que los 3.000 millones sean aportados por el Estado en un plazo que iría entre cinco y siete años. Armengol teme que Matas haya iniciado una estrategia para frenar el avance de las negociaciones, un planteamiento que fue negado categóricamente por Estarás, quien lamentó el tono de las opiniones de la portavoz socialista tras reunirse con Matas.
Desde el PSM, el diputado Eduard Riudavets reconoció que existen muchas posibilidades de alcanzar un acuerdo que permita aprobar el Estatut. Riudavets, que acudió a la reunión junto a Pere Sampol, reivindicó que el nuevo Estatut debe contemplar el deber de conocer el catalán por parte de los ciudadanos de Balears, la mejora del sistema de financiación autonómica y la gestión de los consells. Riudavets comentó que Matas no se niega en redondo a descartar las tres reivindicaciones del PSM.
Desde UM, el portavoz adjunto, Miquel Nadal, anunció que su grupo parlamentario apoyará la enmienda anunciada por Matas de incluir una referencia sobre el nuevo Régimen Especial en el Estatut, pero aclaró que todos los grupos deberán aceptarlo. «Es un tema al que se puede renunciar si no se alcanza un acuerdo», advirtió Nadal tras reunirse con Matas. Nadal apoyó las tesis planteadas por Estarás en el sentido de que el «comité de sabios» ya se había pronunciado a favor de incluir una referencia al Régimen Especial en el Estatut. EU-Els Verds también espera que haya un acuerdo final.
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