Las nuevas infraestructuras viarias que se están construyendo en Mallorca nos están sorprendiendo con construcciones y estructuras monumentales nunca antes vistas en la Isla. Viaductos para el metro, falsos túneles, modernos puentes... Y rotondas, rotondas espectaculares de todos los tamaños.
Las obras de desdoblamiento de la carretera de Valldemossa han dejado la rotonda a nivel de mayor dimensión construida en Mallorca. A la altura de Son Espanyol, se ha construido una glorieta cuyo diámetro interior es de 55 metros y exterior (incluidos los carriles), de 130 metros. La rotonda tiene una magnitud espectacular para el tráfico actual de la carretera de Valldemossa, que registra una intensidad media diaria de unos 25.000 vehículos durante el curso universitario, pero que desciende considerablemente en verano.
Su construcción está justificada. En el futuro, el segundo cinturón que proyecta el Consell de Mallorca desembocará en esta intersección. Bastante tráfico de la Part Forana utilizará esta vía por la que se distribuirá el tráfico sin necesidad de llegar hasta Ciutat. Ahora, sin embargo, resulta excesivamente grande para el servicio que da.
Hasta ahora, la rotonda de Vía Asima había estado en los primeros puestos del ránking de glorietas de mayores dimensiones, con un diámetro interior de 50 metros y unos 100 metros con calzada, pero ahora esta rotonda se encuentra saturada y ya se buscan soluciones para acabar con la congestión.
La rotonda de Son Espanyol casi dobla también a la rotonda de Can Blau. Ésta tiene un diámetro interior de 38 metros y exterior, de 54 metros. Esta rotonda que conecta la carretera de Manacor con la Vía de Cintura y Ciutat, hace unos años, fue sometida a una importante ampliación porque también se había saturado.
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