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P.C.
La vicepresidenta del Govern, Rosa Estaràs, elevó a cien millones de euros el coste del traspaso de las competencias en materia de Justicia a Balears tras conocer, ayer, el estudio que encargó a una empresa auditora después de entrevistarse durante varias semanas con diversos operadores jurídicos de las Islas. En el transcurso de una visita que realizó a la nueva sede del Ministerio Público, junto al fiscal jefe, Bartomeu Barceló, Estaràs afirmó que esa cifra, superior en 40 millones la que anteriormente se barajaba, «debe ser negociada con el Gobierno central». Añadió que esperaba mantener una reunión con los máximos responsables del Ministerio de Justicia en julio, para exponer el contenido de las consultas realizadas en Balears sobre el traspaso de las competencias en esa materia.

«Una vez los organismos consultados den su visto bueno al informe, obtendremos un documento que estará avalado por una serie de interlocutores válidos de la Administración de Justicia», remarcó Estaràs, para quien éste es un «buen punto de partida» porque estará «consensuado por todos». Añadió que posteriormente se procederá a desarrollar las negociaciones, y dependiendo de cómo vayan, «la transferencia podría ser una realidad en 2007», sentenció. Con respecto a la visita que realizó a la nueva sede del Ministerio Público, Estaràs recordó que se trata de un edificio situado en la Plaça Berenguer de Palou, de seis plantas y un torreón (era la antigua sede de la ONCE) cedido por el Govern hasta el 2016. Las obras han sido financiadas íntegramente por el Gobierno central, que destinó algo más de un millón de euros, y albergará a más de ochenta trabajadores.

Las obras del futuro edificio de la Fiscalía se iniciaron hace unos meses y previsiblemente estarán finalizadas el mes próximo. Según señaló la vicepresidenta, se trata de un avance «importantísimo» en materia de Justicia porque permitirá a todos los fiscales y demás profesionales trabajar «cómodamente» en un edificio de 1.800 metros cuadrados, con lo que quedarán cubiertas sus necesidades «más imperiosas».