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El acto central de las fiestas de Nuestra Señora del Carmen del arrabal de Santa Catalina celebrado ayer tarde gozó de gran solemnidad y numerosa participación de fieles y vecinos. En la iglesia de los padres Carmelitas Descalzos, que se llenó de fieles a pesar del fuerte calor, se celebró la misa solemne concelebrada que presidió el vicario general de la Diócesis, Lluc Riera, asistido, entre otros, por los padres Miquel Batle, Celedonio Martínez y Julio González. A la misma asistió la alcaldesa de Palma, Catalina Cirer; los concejales Carlos Veramendi y Margalida Ferrando, y el director general de Relacions Institucionals del Govern balear, Toni Contestí; además de la clavariesa, María Melchor, acompañada por sus damas de honor, Raquel Arévalo y Marta Tendero, vestidas de payesas.

Durante el ofertorio danzaron eball de l'Oferta el grupo de cossiers de la vecina parroquia de la Asunción, cuya danza fue muy aplaudida. Acabada la misa, una unidad de la Policía Local abrió la procesión por las calles colindantes a la parroquia del Carmen. La encabezó la banda de tambores de La Asunción. A continuación, estuvieron los jóvenes cossiers, seguidos de la cruz procesional y numerosos fieles del arrabal, entre los que se encontraban muchos jóvenes, todos ellos portando cirios encendidos. Entre los asistentes vimos a presidentes de cofradías de Semana Santa; niños de primera comunión y la clavariesa y sus damas.

La imagen de la Virgen del Carmen salió a hombros de sus vecinos, adornada con flores blancas. Detrás, estuvo el clero presidido por el vicario General, Lluc Riera, seguido de las autoridades encabezadas por la alcaldesa Catalina Cirer. Cerrando estaba la banda Municipal de Música, que en esta especial ocasión estuvo dirigida por Ramón Juan. Durante el recorrido interpretaron las piezas «Mater Mea», «Juana de Arco», «Pobre Carmen» y «Alma de Àngel».

Amalia Estabén