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El mantenimiento del edificio de GESA en la fachada marítima no afectará finalmente a la construcción del futuro Palacio de Congresos de Palma, según aseguró ayer el arquitecto encargado del proyecto, Patxi Mangado. Mangado hizo estas declaraciones en Pamplona, ciudad en cuyo Palacio de Congresos se expone una maqueta del edificio palmesano de siete metros de largo. Al acto de presentación del edificio acudieron la alcaldesa de Palma, Catalina Cirer; el conseller de Turisme del Govern, Joan Flaquer; el teniente de alcalde de Urbanisme, Javier Rodrigo de Santos, y la teniente de alcalde de Turisme, Francisca Bennàssar. En el acto estuvieron además el consejero de Cultura del Gobierno de Navarra, Juan Ramón Corpas, y la alcaldesa de Pamplona, Yolanda Barcina. Corpas destacó el enorme impulso de turismo de congresos que ha tenido la ciudad desde que se inauguró el palacio de congresos y convenciones.

El edificio se configura como un gran «esqueleto de un barco varado junto al mar», según Mangado, que estará conectado al Passeig Marítim, al que pretende dar continuidad. «Los grandes edificios tienen que tener un valor de pervivencia y éste está pensado para pervivir», dijo. La fachada tendrá grandes cristaleras de vidrio reflectante adornadas con dibujos de fauna marina que se reflejarán en el mar y durante la noche con la iluminación. El edificio tendrá 57.328 metros cuadrados, en los que se incluyen los 1.800 metros cuadrados del hotel de cinco estrellas de 312 plazas.

«El de GESA no es un edificio excepcional», insistió Mangado, quien aseguró que en la ciudad hay elementos arquitectónicos de la misma época mucho más valiosos, como el propio Auditorium. «Al edificio del Palacio de Congresos no le afectará el de GESA, pero creo que quedaría mucho mejor la fachada marítima tal y como la pensó el arquitecto Joan Busquets», añadió. En cualquier caso, también precisó que si los edificios que se construyen en la zona «son un horror», tal vez sea mejor mantener el edificio de GESA. El arquitecto añadió que el edificio sería el mismo aun en el caso de que desde el principio se hubiera sabido que se salvaba la construcción de GESA. El arquitecto aprovechó la maqueta para explicar las características del edificio y para informar sobre algunos de los materiales que se emplearán en su construcción. Una de las fachadas será de un material conocido como falso marés, muy resistente, mientras que para el suelo se está trabajando sobre la posibilidad de que se utilice piedra de cuarcita negra o granito de Zimbawe. La otra fachada será de aluminio tratado con un chorro de agua. La fachada se configura como una gran balconada hacia el mar, con algunas referencias al centro Pompidou de París, pero con enormes estructuras interiores polivalentes, que incluyen una gran sala para 2.440 espectadores y otras más pequeñas para unas 500 personas.