Como contamos días pasados, María Teresa Campos descansa desde el pasado martes en el hotel Meliá de Mar, en el mismo que se hospeda su ex yerno, Alejandro Rubio, y desde el jueves su hija, y ex mujer de éste, Terelu Campos. La coincidencia de los ex bajo el mismo techo, que no bajo el techo de la misma habitación, es porque el padre ha estado unos días de vacaciones con su hija, Alejandra, y ha esperado a que llegara su abuela y madre para dejársela, aunque todavía ayer seguía por estos lugares.
Ni que decir tiene que la coincidencia en el mismo hotel es casual, ya que desde años atrás unos y otros veraneaban en él, aunque, como hemos dicho, bajo sombrillas distintas, separadas entre sí lo que marca la discreción, de la cual tanto las Campos como Rubio han hecho gala siempre. Incluso nos da la impresión de que cuando ella elige la playa para darse un baño, él, que creo que no está solo, opta por quedarse en la zona de la oposición.
Por cierto, la que se baña casi a diario es María Teresa, gran mujer y excelente comunicadora a pesar de que éste no ha sido un buen año. No lo ha sido ni en el plano profesional ni en el personal. Su madre no está bien y un gran amigo acaba de fallecer. Un año horrible que sabemos que la Campos superará.
Pedro Prieto
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