La reina Sofía disfrutó este verano de su nieta, la infanta Leonor, gran protagonista del estío.

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Sin duda, el verano del 2006 pasará a la historia de los veranos mallorquines como el verano en que conocimos a la infanta Leonor.
Porque excepto por aire, la vimos por mar y por tierra muchas más veces de las que nos hubiéramos imaginado días antes de que llegaran los Reyes. Ella, sin duda, ha sido el personaje de un verano que termina, que además nos ha dejado la primera foto oficial, además sin trampa ni Photoshop, de la Familia Real, tomada, como no podía ser de otro modo, en el Palacio de Marivent.
Por lo demás, pocas novedades. Tal vez la má sobresaliente fuera que los Cortina, Alberto y Elena, no sólo inauguraron su casa mallorquina, Montcaire, recientemente adquirida, sino que también estrenaron super barco con el que navegaron, sobre todo, por la costa norte de la Isla. Él, casi siempre con camisa y pantalón y el móvil en la oreja, que es como suele veranear un empresario con varios frentes abiertos.