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Un administrador judicial se ha hecho cargo de las cuentas de tres hoteles situados en primera línea de Cala Major, Santa Ana, Playa Cala Major y La Cala, después de que las sociedades explotadoras -Beach Hotels SA, Gesbal y Annapurna Investement SA- hayan presentado ante el titular del Juzgado de lo Mercantil número 1 de Palma un concurso de acreedores (suspensión de pagos) para hacer frente a un pasivo de cuatro millones de euros.

Los hermanos Pedro y Guillermo Vidal son los accionistas mayoritarios de las tres sociedades, y el acreedor principal de los hoteles es la Seguridad Social. Este diario intentó ayer, sin éxito, ponerse en contacto con Pedro Vidal, presidente de la Asociación de Salas de Fiesta de Balears.

Con la admisión a trámite de la petición de suspensión de pagos, el juzgado ha paralizado cualquier intento de embargo de los bienes de las sociedades explotadoras.

Las dificultades económicas de los tres hoteles de Cala Major han sorprendido al sector turístico balear, ya que se han puesto de manifiesto en una de las mejores temporadas en muchos años.

Un empresario del sector de alojamiento afirmó que la suspensión de pagos de los hoteles Santa Ana, La Cala y Playa Cala Major, demuestra que los récords de visitantes no siempre van unidos a la rentabilidad del sector. Recordó, además, que los hoteles de las Islas acumulaban tres temporadas sin subir sus precios, y que sólo han logrado un alza similar al IPC para la próxima temporada.

Los tres establecimientos, ahora en suspensión de pagos, suelen abrir sus puertas todo el año, ya que en invierno se abastecen del turismo del Imserso.