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Jamás pudo pensar el fabricante de papel higiénico que el rollo de cartón que sostiene el preciado elemento de higiene terminaría siendo el sombrero de un rey mago. Ni tampoco el inventor del yogur que los vasos formarían parte de un juego de ajedrez. Todo esto sin electrónica, pilas ni cables. La buena idea de Mallorca Recicla ha calado hondo en los visitantes que se acercan al segundo piso del moderno edificio que alberga el Parc de Tecnologies Ambientals del Consell de Mallorca.

La imaginación de los artistas, pequeños y jóvenes, es prodigiosa. Destacan la enorme vaca o el mapamundi-rollo fotográfico. Este es el resultado de los programas de sensibilización que lleva a cabo Mallorca Recicla en los centros escolares. También ofrecen talleres para aprender a hacer papel reciclado.

Los profesores que impulsan las visitas al Parc de Tecnologies Ambientals serán, a buen seguro, felicitados por quienes admiran la solidaridad del reciclaje, pero denostados por la industria de las pilas y de los juegos teledirigidos que podrían ver en ello un poderoso competidor para Navidad.

Óscar Pipkin