El PP apeló ayer a sus más de 190.000 votos conseguidos en las últimas elecciones para no votar a favor de la admisión a trámite de la iniciativa popular avalada por 35.000 firmas para aprobar medidas de emergencia en ordenación territorial. Todos los partidos, incluido UM, aceptaban la admisión a trámite de la iniciativa que fue defendida ante el pleno del Parlament por Macià Blázquez, presidente del GOB. UM volvió a desmarcarse del PP, aunque Nadal dijo que votar a favor de la admisión a trámite no suponía apoyar totalmente la iniciativa.
Desde la tribuna de oradores, Macià Blázquez acusó al pacto PP-UM de haber promovido la destrucción del territorio y de preferir las autopistas en lugar de promover el transporte. Blázquez criticó que Mallorca, con sólo 3.200 kilómetros cuadrados, haya construido 200 kilómetros de autopistas. La iniciativa popular proponía prohibir la construcción de nuevas autovías o autopistas, la ampliación de los puertos y los campos de golf y centros de ocio y comerciales en suelo rústico.
Desde el Govern, el conseller de Medi Ambiente, Jaume Font, dijo en primer lugar que respetaba la iniciativa presentada por los ciudadanos, pero cuestionó su «escasa solvencia técnica, política y argumental». Font recordó que las competencias en urbanismo son de los consells. En la misma línea se pronunció al final del debate el portavoz del grupo popular, Joan Huguet, quien acusó a la oposición de apoyar esta medida sin argumentos sólidos. Entre otras cuestiones, Huguet recordó que la iniciativa popular pretende frenar la construcción de más puertos y que, en Menorca, el PSOE y PSM han apoyado el nuevo dique de Ciutadella. «Esta iniciativa quedaría desnaturalizada si se admitiese a trámite», dijo Huguet.
Desde Esquerra Unida-Els Verds, Margalida Rosselló pidió una rectificación del Govern. Miquel Nadal, de UM, anunció el voto favorable de su grupo para que la iniciativa popular pudiese tramitarse. «Es un deber como demócrata, teniendo en cuenta que es una petición de los ciudadanos», dijo Nadal. No obstante, Nadal aclaró que UM no estaba a favor de muchos de los artículos de la iniciativa popular. La socialista Francina Armengol aseguró que la propuesta defendida por distintas plataformas ciudadanas era una buena oportunidad para poder alcanzar un acuerdo en materia de infraestructuras y de ordenación del territorio. Armengol ofreció el apoyo de su partido para conseguir este objetivo. Maria Antònia Vadell, del PSM, acusó al Govern de destruir el territorio «sin complejos».
En el pleno también tomó posesión de su cargo Antoni Alorda, del PSM, que sustituye a Pere Sampol. Alorda ya fue diputado la pasada legislatura. Durante el pleno volvió a producirse un rifirafe entre la oposición y el Govern por la adjudicación de la construcción del nuevo hospital de referencia.
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