La actualidad manda, y a esa norma se aferró ayer el decano del Colegio de Abogados de Balears, Joan Font, para comentar ante los nuevos colegiados el caso de la letrada detenida por su presunta implicación en la extorsión a narcotraficantes del poblado de Son Banya.
Font dedicó unos minutos de su discurso oficial para referirse a su actuación en ese tema, y recordó que estuvo presente en el registro de la oficina de la abogada como una manera de proteger los expedientes y el secreto profesional de otros clientes de la letrada.
Insistió, en ese contexto, que el Colegio está «sorprendido y preocupado» por la supuesta vinculación de una colega en un asunto tan oscuro como ese, y anunció que la entidad tomará las medidas oportunas una vez que el juez se pronuncie.
También, mencionó el caso de otro abogado, a quien la policía le solicitó un expediente relacionado con la compraventa de una vivienda y un posible blanqueo de dinero. En este tema, fue categórico al afirmar que ese letrado «no está siendo investigado».
Font presidió el acto en el que 31 abogados realizaron la jura, en una Mesa en la que también estuvieron presentes Javier Capelastegui, diputado segundo, y Francisco Riera, secretario de la Junta de Gobierno.
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