TW
0

Primer plenario del Foro de Comercio Benicarló en Palma tras la aprobación el pasado día 16 de la directiva europea de servicios Bolkestein criticada por su «liberalismo a ultranza» y contemplada como una «grave amenaza» contra el pequeño y mediano comercio. La razón no es otra que la supresión de razones comerciales para frenar la expansión de grandes superficies en la UE. Ante esta situación «que menoscaba las competencias autonómicas, intentaremos la vía territorial, basada en la sostenibilidad y la movilidad, para ordenar el libre comercio con igualdad de oportunidades. Una vía que debe recoger la reforma del Estatut balear. No podemos perder tiempo», apuntó el conseller de Comerç, Josep Juan Cardona.

Bolkestein abre la puerta a las grandes superficies sin tener en cuenta su impacto sobre el tejido empresarial existente.

La trasposición de la norma a la realidad española topará con el «ultraliberalismo de Pedro Solbes», ministro de Economía socialista, afirmaba ayer el secretario institucional de Pimeco, Josep Capó, quien lamentó que Europa no haya dejado fuera de la directiva al pequeño comercio.

La batuta europea marcará la realidad española antes de tres años a lo sumo, apuntaban ayer los fundadores del Foro de Comercio Benicarló. En este nuevo escenario, representantes de la administración y de la pequeña y mediana empresa de 12 CCAA comenzarón a debatir estrategias.

Cardona adelantó que el Govern se mostrará beligerante ante la directriz y destacó la importancia de la reforma estatutaria para ordenar a través de criterios territoriales, al igual que el Estatut catalán con su de Ley Territorial de Equipamientos Comerciales.