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JOAN J. SERRA
La entrada de escombros en las plantas de tratamiento de la concesionaria de esta gestión en Mallorca, Mac Insular, se incrementó un 46 por ciento el pasado noviembre, después de que el Consell de Mallorca denunciara ante la Fiscalía un total de 13 vertederos ilegales, normalmente canteras que han abandonado la actividad extractiva.

Concretamente, el pasado octubre, los centros de recepción de Mac Insular (Inca, Llucmajor, Artà, Manacor, Calvià, Porreres y dos en el polígono ambiental de ses Veles, junto a Son Reus) recibieron 26.413,78 toneladas de escombros. Precisamente en ese mes, el director insular de Residus, Guillem Riera, hizo públicas las denuncias presentadas ante Fiscalía referidas a 13 vertederos presuntamente ilegales, ubicados en diferentes municipios de Mallorca. Tras conocerse esas denuncias, al mes siguiente, los centros de recepción de Mac Insular recibieron 38.588,34 toneladas, un incremento del 46 por ciento.

Guillem Riera expresó a este periódico su satisfacción por este hecho y explicó que «buena parte de este incremento se debe a obra pública, de lo que cabe deducir que con anterioridad no recibía un tratamiento adecuado. De todos modos, todavía estamos lejos de lo deseable, esto es, una media de 100.000 toneladas mensuales y un total de 1,1 ó 1,2 millones al año. Aún no tenemos los datos de diciembre, pero calculamos que 2006 se cerrará con unas 300.000 toneladas, si bien hay que tener en cuenta que se trata del primer año de funcionamiento del sistema de gestión y tratamiento de residuos de construcción y demolición».