Calvià es el municipio más endeudado de Mallorca en términos absolutos.

Calvià es el municipio más endeudado de Mallorca en términos absolutos.

04/02/07 0:00
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NEKANE DOMBLÀS
La deficiente situación financiera de los ayuntamientos de Mallorca ha provocado un espectacular aumento del recurso a la deuda por parte de los municipios en los últimos cinco años. Según un exhaustivo estudio realizado por el departamento d'Economia del Consell de Mallorca, que dirige el conseller Miquel Angel Flaquer, el recurso al endeudamiento de los ayuntamientos de Mallorca ha aumentado un 160 por ciento en el periodo comprendido entre los años 2001 y 2005. A finales de 2001, la deuda acumulada de los ayuntamientos de la Isla sumaba un total de 99,8 millones de euros. Si se suman todos los nuevos préstamos solicitados por los municipios a partir de ese momento, la deuda global generada pasó a ser de 159,9 millones de euros, lo que representa un aumento porcentual del 160 por ciento. En el estudio realizado por el Consell de Mallorca no se ha detraído el dinero que los ayuntamientos hayan podido amortizar a lo largo de estos años. Es decir, que a la cifra global de casi 160 millones de euros, habría que descontar el dinero que los municipios han devuelto al banco en concepto de deudas previas. Según el conseller d'Economia de la institución insular, Miquel Angel Flaquer, la cifra es inferior pero no demasiado.

¿Y por qué los ayuntamientos se endeudan de tal manera? La explicación es simple, según el conseller. El modelo de financiación municipal es tan deficiente que a las instituciones municipales no les queda otro remedio que pedir préstamos a los bancos para poder hacer las inversiones necesarias. El dinero con que cuentan los municipios procede de tres fuentes principales. Una de ellas es la transferencia que realizan otras administraciones, especialmente el Gobierno. La otra gran fuente de ingresos son las licencias urbanísticas. En los últimos años, las transferencias no han aumentado y las licencias se han mantenido casi invariables debido a las restricciones urbanísticas. En esta coyuntura, a los ayuntamientos no les queda otro remedio que recurrir a la tercera fuente de financiación, que es el endeudamiento. Sólo así pueden hacer frente a las inversiones de mejora de las infraestructuras municipales. A eso se debe el aumento de la deuda de los ayuntamientos, según el responsable d'Economia de la institución insular.

Flaquer asegura que esta situación es especialmente preocupante si se tiene en cuenta que los ayuntamientos son las administraciones más cercanas a los ciudadanos y, por lo tanto, las que se ven obligadas a prestar servicios para los que en ocasiones no tienen financiación suficiente. La consecuencia, el descenso en las inversiones, es un problema de gran calado ya que los principales afectados son los ciudadanos. Esta es la razón por la que Flaquer asegura que debe acometerse de inmediato una reforma del sistema de financiación municipal.