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OSCAR PIPKIN
La conferencia de Pedro Meaurio en Son Bonet fue seguida con atención por un público exigente en temas aeronáuticos y la reunión se lo merecía. El que fuera director de Son San Joan durante el período más importante de su crecimiento detalló sus inicios, salpicados con anécdotas y detalles de precisión, bien documentados.

«Aún está vigente el Plan de Aeropuertos de 1963, que fue la primera planificación de Aviación Civil dentro del Ministerio del Aire. Después de éste hubo más planes, pero aquél acordó lo que sería la posición de la administración frente a los problemas y sus posibles soluciones».

Meaurio, piloto e ingeniero aeronáutico y cuyo puesto de director del aeropuerto constituyó el primer nombramiento de un civil, estuvo al frente de Son Sant Joan entre 1979 y 1999, cuando se trasladó a Málaga.

«Los sucesivos planes directores se redactan para los siete aeropuertos principales de AENA, entre los que se encuentra el nuestro y para el resto de los 51 aeropuertos españoles, divididos en grupos, y así se fue diseñando lo que sería esta terminal que luego construyó la empresa Initel».

Las fotografías que ilustraron la conferencia junto a los planos iniciales que portaba en cada párrafo, dicen claramente que este joven vasco vive hoy el mundo de la aviación civil con el mismo entusiasmo con el que se doctoró en 1967. Señaló con énfasis que «en los años 80 hubo angustia porque las dos terminales ( la "A" y la "Charter") no eran suficientes y Mallorca había quedado fuera de las sedes del mundial de futbol de 1982, todo el dinero se había destinado para crecimiento de aquellas ciudades . Afortunadamente, la UE pagó el 80 por ciento de aquellos 20.500 millones de pesetas que salieron a concurso para la construcción de la nueva terminal».

Meaurio matiza que «la inflación de los diez años transcurridos entre los cálculos y los comienzos efectivos, obligaron a eliminar cristales, puertas de embarque y otros detalles para ajustarse a las bases». Y una más: «Esta terminal debería haber sido del tipo Atlanta con varios muelles para aviones y desplazamientos por debajo, pero eso obligaba a ocupar terrenos de la Base Militar. Al no haber acuerdo, el diseño tuvo la variación que tenemos»

«Ahora se planifica dentro de lo que hay, esta infraestructura no va a crecer porque estamos rodeados de construcciones, yo creía que invertir dinero comprando terrenos alrededor para construir, algún día, la tercera pista. Hoy ya no es posible, hay que crecer dentro de estos límites».