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La presidenta de Unió Mallorquina, Maria Antònia Munar, apeló ayer al voto útil a UM como única forma de evitar que el PP obtenga una mayoría absoluta que, unida a la presión de sectores económicos, acabe derivando en «corrupción». La presidenta de los nacionalistas realizó esta llamada en la presentación del programa con el que UM concurre a las elecciones. Afirmó que las mayorías absolutas no son buenas en ayuntamientos como el de Palma, sometidos a una gran presión económica, o los de Calvià y Andratx.

«UM quiere gobernar», aseguró la presidenta de los nacionalistas, quien anunció que las negociaciones se plantearán sin «apriorismos» sobre quién será el president de las instituciones. «Lo importante es Mallorca, no quien ocupe los cargos», precisó. Munar volvió a denunciar el «expolio» que sufrirá Mallorca con respecto a las otras islas si UM no está en el Govern.

Por lo que respecta al contenido del programa electoral, la propuesta más sorprendente de las que presenta UM es la supresión de la Delegación del Gobierno y el reparto de sus actuales competencias entre Govern, Consell y Ajuntament. Se trata de una de las propuestas incluidas en el apartado de mejor de autogobierno, que fue presentado por el número cuatro de la lista al Parlament, Josep Melià. También se incluye la cesión de las competencias de inmigración, aeropuerto y costas al Govern y las de comercio, régimen hidráulico y caza, a los consells. También proponen modificar la Ley de Capitalidad para excluir las excepciones urbanísticas de Palma.

En materia fiscal, Miquel Angel Flaquer informó de que el programa de UM incluye la creación de desgravaciones y exenciones fiscales con propósitos sociales, anunció medidas discriminatorias en positivo para favorecer la agricultura y ganadería de las Islas y anunció la eliminación de plazas turísticas obsoletas para mejorar el producto turístico.

Cati Julve presentó el programa social, que incluye la creación de la figura de agentes den la igualdad y mediadores culturales para propiciar la integración de los inmigrantes. La inmigración tiene que controlarse, según Julve, y es necesario que los que llegan hagan un esfuerzo de «mallorquinidad».

En materia de ordenación del territorio, Bartomeu Vicens anunció la penalización económica para aquellos ayuntamientos que no se adaptan a la normativa urbanística y rechazó la propuesta de consorcio de disciplina anunciada por Rosa Estaràs. Afirmó además que UM quiere seguir siendo «un lastre» para que algunos ayuntamientos como el de Calvià no ejecuten proyectos desmesurados. Anunció una ley del suelo y prometió la construcción de 6.000 viviendas para jóvenes.

Dolça Mulet explicó el programa de cultura y anunció un festival de la canción catalana en Mallorca, así como otro festival de cine, además de un auditórium virtual en internet.

Por último, Antoni Pascual anunció la creación de tres nuevas líneas de tren (Sa Pobla-Alcúdia, Manacor-Cala Ratjada y bahía de Palma) y apostó por la mejora de los accesos a Palma y la creación de ejes transversales en las carreteras de Mallorca. Si UM gana, no se ampliará el aeropuerto.