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El PP ha entrado ya en la escena de la negociación con Unió Mallorquina con la baza de la Alcaldía de Palma. En el PP son conscientes de que Catalina Cirer puede ser elegida alcaldesa en minoría el próximo sábado, pero existe disposición por parte de los 'populares' a seguir negociando con UM repartos en el gobierno municipal. Ya nadie discute en las filas 'populares' que darle la Alcaldía a Nadal un año o dos sería una buena solución para intentar mantener un pacto global con el PP, pero Matas ha optado por no descubrir sus cartas y ganar tiempo. El president del PP balear no explica su estrategia a nadie, ni siquiera a su entorno más cercano. Nadal también es consciente de que con el PP puede ser alcalde. Con el PSOE y el Bloc, el dirigente de UM no podrá lograr su objetivo. Fuentes del PP señalan que es posible que Matas y Munar se hubiesen reunido este fin de semana ya que ambos contactaron por teléfono antes del sábado para pactar que no irían a la final de tenis de París. Pero nadie ha confirmado el encuentro que podría haberse celebrado el sábado, aunque no ha trascendido nada al respecto.

Mientras tanto, la alcaldesa en funciones de Palma ya tiene plenamente asumido que podría ser la moneda de cambio de Matas para poder mantener las principales instituciones de Balears. Cirer podría ser elegida alcaldesa el día 16, pero dentro de dos o tres años la actual alcaldesa en funciones abandonaría el cargo para cederlo a Miquel Nadal, de UM. De esta manera, el PP espera conseguir el apoyo de UM después de unas negociaciones en las que parecía evidente una mayor conexión entre los nacionalistas y la izquierda.

Cirer ha comentado a personas de su entorno que hará lo que decida el partido. Es decir, la alcaldesa del PP estaría dispuesta a renunciar a una parte de su mandato para conseguir un pacto global con UM. Sea como sea, Matas deberá buscar una salida digna a Cirer si tiene que ceder una parte de la Alcaldía a Nadal. Y tampoco será fácil para Matas justificar esta cesión ante la ejecutiva regional del PP.