«En igualdad de condiciones, todo el mundo se inclina por un pacto con la izquierda». Lo dijo ayer la presidenta de UM, Maria Antònia Munar, en un improvisado encuentro con los periodistas al término del Consell Polític. A Munar acompañaron en esta comparecencia la mayor parte de la ejecutiva, pero con una ausencia destacada: la del candidato a la Alcaldía de Palma, Miquel Nadal, quien considera que UM debe seguir negociando para conseguir la Alcaldía de Palma. Algunas fuentes consultadas aseguraron que Nadal se mostró en contra de un pacto con el PSOE que pase por la cesión de la Alcaldía.
La presidenta de los nacionalistas reiteró en la rueda de prensa que para UM las presidencias no son imprescindibles. «No es una condición sine qua non», aseguró la presidenta cuando se le preguntó por la Alcaldía. En cualquier caso, reiteró que, si no hay acuerdo antes del sábado, Miquel Nadal se votará a sí mismo en el pleno de constitución del Ajuntament. «Creemos que el que quiere formar gobierno debe hacer llegar sus propuestas antes del sábado», dijo.
Munar aseguró que en la reunión del Consell Polític se había constatatado «un sentimiento de cambio» provocado por el hecho de que el PP no sólo no había conseguido la mayoría absoluta en Mallorca y en Menorca, sino que además las había perdido en el Consell de Eivissa, en el Govern balear y en Ajuntament de Palma. Munar reiteró que la voluntad de pactos de UM no pasa por conseguir presidencias, sino por el acuerdo de una serie de actuaciones importantes, entre las que citó de forma específica varias relativas a Palma, como el desarrollo de la fachada marítima, la reconversión de Jacint Verdaguer o las viviendas de Son Busquets, aspectos en los que los programas de PSOE y UM coinciden casi plenamente.
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