Un informe de la organización Ecologistas en Acción sitúa en la costa de Balears un total de 45 «banderas negras» y 51 «puntos negros», definiendo «banderas negras» como aquellas zonas que soportan una acción humana agresiva con los ecosistemas y «puntos negros» como afecciones litorales menos graves que las anteriores.
En toda España, Ecologistas en Acción ha concedido 265 «banderas negras»y 309 «puntos negros». Balears ocupa el segundo lugar en «banderas negras» por detrás de Andalucía (50) y el tercero en «puntos negros» por detrás de Murcia (63) y Andalucía (56).
En el caso concreto de Mallorca, la organización ecologista sitúa «banderas negras» y «puntos negros» en los municipios de Calvià, Campos, Palma, Felanitx, Pollença, Muro, Andratx, Artà, Banyalbufar, Santanyí, Manacor, Capdepera, ses Salines, Deià, Estellencs, Valldemossa, Sóller, Santa Margalida, Son Servera y Llucmajor.
Las agresiones a la costa balear localizads y denunciadas por Ecologistas en Acción son muy variadas y hacen referencia a distintas actuaciones: invasiones del dominio público, construcción o ampliaciones de puertos deportivos, urbanizaciones, campos de golf, construcciones de centros deportivos y comerciales, destrucciones o degradaciones de sistemas dunares, edificación o ampliación de de hoteles, funcionamiento deficiente de depuradoras, ocupación de zonas húmedas, salinización y contaminación de acuíferos, dragados, extracciones de arena, retirada inadecuada de Posidonia de las playas y construcción de paseos marítimos. El informe menciona de manera destacada el funcionamiento de estaciones depuradoras de aguas residuales costeras que no cuentan con tratamiento terciario o éste es deficiente, superando los valores máximos establecidos por la legislación para nitrógeno y fosfatos.
El estudio también hace referencia a actuaciones conocidas, tal es el caso de la ampliación del hotel Formentor, la del puerto deportivo de Port Adriano, en Calvià, y la urbanización de la zona húmeda de ses Fontanelles, en Palma.
Igualmente, el informe considera negativamente el mantenimiento de la urbanización ilegal de ses Covetes, en Campos.
Ecologistas en Acción también se hace eco de actuaciones que han quedado, de momento, paralizadas, como la construcción de la nueva fachada marítima de Palma o la ampliación del Club Nàutic de s'Estanyol.
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