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La sorpresa del verano es confirmar el buen rollo que existe entre dos 'ex', Jean Marie Rossi y Mari Carmen Martínez. ¿Que por qué? Porque el anticuario "o ex anticuario" su esposa e hijo, con una amiga de éste, están pasando unas vacaciones en Mallorca, y lo están haciendo en la casa que su ex, la Bordiú, compró meses atrás en la zona de Andratx, casa que le ha prestado junto a su barco, el TQ, que regaló a su marido, José, con motivo de su boda. ¿Qué les parece? ¿Es o no noticia? Porque si estaba claro que las relaciones entre Rossi y la nieta de Franco eran buenas, ahora, con esto, se acaba de confirmar. El resto lo dicen las imágenes.

Cualquier día de la semana, el actual matrimonio Rossi, el hijo de éste y la amiga, junto con Cynthia, la hija que tuvo con Mari Carmen, salen de la casa y se van al puerto donde esta el TQ. Tras subir a bordo "a Rossi le cuesta más de la cuenta, por lo que le tienen que echar una mano", se hacen a la mar, disfrutando de la jornada.

Por lo que hemos visto, Cynthia tiene la costumbre de tumbarse sobre la plataforma de popa, eso sí, a partir de ayer con la precaución de si toma el sol en top less, a nada que se incorpore debe colocarse el sujetador, pues el «enemigo invisible» puede estar al acecho desde cualquier lugar y... ¡click, click! Como todos recordaremos, Jean Marie y Mari Carmen, que se conocieron en Bari, durante un crucero en 1979, estuvieron unidos por el amor y el dolor durante diez años. Por amor, se casaron; es más, ella, por él, lo dejó todo: país y familia, por lo que fue muy criticada. En cuanto al dolor, ella perdió a uno de sus dos hijos, Fran, en un accidente, y él a su hija Matilda, también en un accidente, esquiando en Bahamas. Las dos desgracias ocurrieron en 1984. En 1985, nació Cynthia, y en 1986, si mal no recuerdo, se vinieron de vacaciones a Mallorca, a Sol de Mallorca.

Cuando se acabó el amor entre ambos, se separaron. En la vida de ella apareció, poco después, un arquitecto italiano Roberto Federicci, con el que convivió largos años. Luego conoció al santanderino José campos, del que se enamoró perdidamente, casándose con él hace un año. Mientras tanto, Jean Marie y su nueva esposa se solean en Mallorca, en la casa que Mari Carmen compró para disfrutar con José, al que el anticuario califica de 'el mejor'.

Ya digo, mejor buen rollo ¡imposible!

Pedro Prieto