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A finales de septiembre comenzará un nuevo curso en la Universitat de les Illes Balears (UIB) y los nuevos estudiantes universitarios «invadirán» las instalaciones del campus un año más.

La UIB es una universidad con pocos años de vida y los planes de estudios cambian y se amplían cada curso. Lo que no evita que la Universitat de les Illes Balears sólo imparta 42 titulaciones universitarias de las 140 de las que consta el catálogo cerrado en España, lo que significa que los universitarios baleares sólo pueden elegir cursar un tercio de las opciones previstas.

Un dato que no sólo hay que achacar a la «juventud» de la UIB ya que la Universitat ya comenzó a elaborar los nuevos planes de estudio adaptados al Espacio Europeo de Educación Superior (EEES) a principios del curso pasado.

Es decir, el panorama universitario actual cambiará «radicalmente» al desaparecer las diplomaturas y licenciaturas imponiéndose, de este modo, tres ciclos para los títulos oficiales: el primero de ellos recoge los estudios de Grado, de cuatro años de duración, donde estarán incluidos la mayor parte de las carreras que ahora dan derecho al título de diplomado o licenciado. El segundo, denominado Máster, será obligatorio para algunas titulaciones asociadas a profesiones reguladas por una ley. Mientras que el tercer ciclo es el Doctorado, dividido en un periodo de formación y otro de investigación.

Cada año más de 700 alumnos universitarios deben trasladarse del archipiélago a la península, especialmente a ciudades como Madrid o Barcelona, al no tener elección ya que la carrera elegida por el estudiante no se cursa en las Islas.

Por ejemplo, la UIB no imparte dentro las Ciencias Sociales y Jurídicas enseñanzas de primer y segundo ciclo como Ciencias Políticas y de la Administración, Publicidad y Relaciones Públicas o Sociología, por lo que un alumno balear tendría que desplazarse a Madrid, Barcelona o Valencia por ejemplo para poder cursar estos estudios.

En el ámbito de las Humanidades, las Bellas Artes, Traducción e Interpretación o Filosofías como la alemana, árabe, clásica, eslava, francesa o italiana tampoco podrían estudiarla en el archipiélago.

En las Enseñanzas Técnicas de primer y segundo ciclo, si un alumno no puede volar a la península, no podría ser arquitecto, o ingeniero aeronáutico, de minas o ingeniero naval y oceánico. Otro ejemplo, en Ciencias de las Salud no se puede estudiar ni farmacia, ni medicina, veterinaria y odontología.

A la espera de más ampliaciones, a los universitarios de las Islas les queda desplazarse o elegir una carrera del catálogo.