Payeses mallorquines han expresado sus quejas por los bajos precios que perciben por los limones, entre 0'35 y 0'45 euros por kilo, mientras que cítricos de este tipo procedentes del extranjero, concretamente de Argentina, se venden en las grandes superficies a 1'25 euros, aunque han llegado a superar los 2 euros. En esas mismas grandes superficies, los limones mallorquines apenas llegan al euro por kilo.
Antoni Burgos, productor de limones de la Vall de Sóller, entre otras actividades agrarias, afirma que «hay payeses que no recogen los limones porque no les vale la pena el trabajo y las dejan en el suelo. Los agricultores se desaniman y abandonan. Ahora estamos cobrando 0'45, pero en la Vall de Sóller hemos llegado a mínimos de 0'10 euros por kilo. El resultado de todo ello es que los campos de limoneros se abandonan, igual que vemos cómo el pinar invade el olivar. Los que se deciden a mantenerse están destinando a ello dinero procedente de otros ingresos».
Burgos muestra su decepción por el hecho de que «en Mallorca se está primando al producto de fuera, cuando los payeses tienen muchas dificultades para salir adelante. Sólo por el hecho de conservar el paisaje, las Administraciones deberían primar a nuestros productos y a nuestros productores. Todo lo demás nos ofende y nos deja desamparados».
Los precios que cobran actualmente los payeses no cubren los costes de la recogida, afirman los afectados, y, por tanto, se ven obligados a abandonar campos que, en el caso de la Vall de Sóller, en épocas pasadas eran motivo de orgullo.
Por su parte, Andrés Silva, gerente de Fruita Bona, la mayor comercializadora de fruta de Mallorca, afirmó que «puede ser que los limones argentinos que ahora vemos en los mercados sean más frescos que los mallorquines, pues a lo mejor sólo tienen dos semanas de transporte, mientras que cítricos de la Isla a la venta pueden corresponder a meses atrás y han sido conservados en cámaras frigoríficas».
Silva comenta que los mercados son muy oscilantes y pone como ejemplo la uva de mesa: «Hace sólo dos semanas se veía uva de mesa a casi 5 euros por kilo y ahora se ofrece a 1'70-1'80 euros por kilo. ¿Qué ha pasado? Simplemente, que las grandes superficies diseñan estrategias de ventas y deciden que un determinado producto vaya barato, presentando ofertas para que actúen como reclamo».
Para Silva, «un precio pagado a los payeses de 0'40-0'50 euros por kilo de limones es muy bueno, pues lo habitual es que cobren entre 0'20 y 0'30. La media del precio que Fruita Bona pagó en 2006 a los payeses fue de 0'28 euros por kilo, y eso que comercializamos 200.000 kilos».
El gerente de Fruita Bona señala que «pronto comenzará la temporada del limón mallorquín y entonces será más fresco que el de fuera. Entonces podrá mejorar su precio». No obstante, Andrés Silva matiza que «todo depende de la temporada, de si hay poco cítrico o si hay excedentes. Cada año tiene sus propios condicionantes».
Sin embargo, la temporada en la Vall de Sóller es diferente a la del resto de la Isla. Mientras que en Mallorca, por lo general, la temporada de producción del limón va de septiembre a mayo, en la Vall de Sóller, por sus especiales condiciones geográficas y microclimáticas, suele ir de enero a agosto.
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