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El kite surfing o kite surf, también conocido como kiteboarding, y algunas veces en Europa como flysurfing, es una modalidad de navegación que consiste en el uso de una cometa de tracción (kite, del inglés), que está sujeta al deportista (kiter) por 4 ó 5 (rara vez dos) líneas, dos fijas a la barra, y las dos o tres restantes pasan por el centro de la barra y se sujetan al cuerpo mediante un arnés, permitiendo deslizarse sobre el agua mediante una tabla diseñada para tal efecto.

El equipo básico de kitesurf se compone de una cometa, la barra de dirección, arnés y tabla. Opcionalmente puede incluir elementos de seguridad y confort como el casco, un chaleco (de flotación o contra impactos), neopreno y escarpines.

En Mallorca, en especial en la zona norte, es habitual ver a jóvenes practicar este deporte, ofreciendo al público todo un espectáculo de destreza y deportividad. Aunque la práctica de este deporte de manera extendida es muy reciente, se tiene conocimiento que desde muy antiguo en China e Indonesia se usaban cometas para arrastrar pequeñas embarcaciones. No es, sin embargo, hasta 1977 cuando Gijsbertus Adrianus Panhuise patenta un sistema de navegación sobre una tabla de surf traccionada por una especie de paracaídas, convirtiéndose así en el padre de este deporte. En Indonesia es una cultura y un arte, los diseños son amplios y variados, en estas zonas es dónde se encuentra la industria de kiteboarding. También es un gran lugar para entrenar y desarrollar el material, esto junto a la mano de obra barata y el desarrollo industrial de esta zona la sitúa como pionera en cuanto al desarrollo del kiteboarding. Marcas de renombre como North Kiteboarding la utilizan como sede central. El windsurf y el kitesurf son dos deportes que requieren de viento para su práctica, algo que en pleno corazón de la Tramuntana no es un problema. En diversos puntos del término municipal de Pollença también es habitual ver a muchos deportistas disfrutando con esta deporte. Sentir el viento, navegar con una cometa o una vela son sensaciones únicas, propicia para los amantes de los deportes extremos. lMercedes Azagra
Fotos: Iñaki Oteiza