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GERMÀ VENTAYOL Según se desprende del sondeo electoral realizado en exclusiva por el Instituto Balear de Estudios Sociales (IBES) para se advierte un importante avance del PSOE hasta igualar, en la práctica al PP, en cuanto a la intención de voto. Ambas formaciones volverán a repartirse a partes iguales los ocho diputados al Congreso de los Diputados de la circunscripción de Balears.

Ultima Hora

Esta campaña no está provocando cambios sustanciales respecto al sentido del voto de los electores, aunque el sondeo de IBES detecta que mientras el PP mantiene, en la práctica, intactos sus apoyos -en torno al 44 por ciento del electorado-, el PSOE está acumulando en mayor medida el «voto útil» de las formaciones minoritarias hasta casi alcanzar a los conservadores, con un 43 por ciento, a costa de Esquerra Unida-Els Verds.

Por el contrario, la coalición nacionalista Unitat recupera posiciones cuando ya se ha superado el ecuador de la campaña y situarse en una horquilla de entre 6 y 7 por ciento en intención de voto en el conjunto de toda la circunscripción balear. Los nacionalistas deberían avanzar cinco puntos para poder obtener representación en la Cámara Baja.

Las elecciones del 9-M presentan una importante novedad respecto a confrontaciones anteriores. La creación de Unitat -todos los partidos nacionalistas incluyendo UM- y conseguiente fragmentación del Bloc, con Esquerra Unida-Els Verds.

El votante del Bloc se decanta, en un 41 por ciento por apoyar a Unitat y en un 28 por ciento al PSOE, mientras que la opción de EU sólo logra recoger el 11 por ciento de estos electores.

El comportamiento de Unió Mallorquina respecto a Unitat también resulta esclarecedor. Un 29 por ciento apoyará a Unitat -coalición en la que está integrado el partido que lidera Miquel Nadal-, pero un 12 por ciento lo hará en favor del PSOE y un 9 por ciento del Partido Popular.

En el electorado de UM hay un elevado grado de indecisos, un 25 por ciento, y de abstencionistas, un 17 por ciento. Datos que deberán ser objeto de análisis para ultimar la estrategia final de la campaña.

El sondeo electoral de IBES apunta que la participación final en las elecciones del 9-M será de un 67-68 por ciento; muy similar a la de hace cuatro años, pero alejada de las convocatorias de 1993 y 1996 en las que se superó el listón del 70 por ciento.

Todas las proyecciones demoscópicas realizas por IBES coinciden en apuntar que el incremento de la participación es un factor que, en principio, beneficia con claridad a la candidatura socialista que encabeza Antoni Garcías frente a la conservadora de Maria Salom, que mantiene inamovible su cuota electoral.

Es por esta razón por la que la última semana se considera decisiva para configurar el mapa electoral definitivo de Balears, toda vez que la movilización que logre el PSOE será determinante para cuantificar su avance en las urnas ya que existe, a tenor del sondeo de IBES, una bolsa de simpatizantes socialistas que sólo se molestarán en ir a votar el próximo domingo si encuentran una motivación suficiente, bien porque les convencen los últimos mensajes del candidato José Luis Rodriguez Zapatero o bien porque ven como un riesgo inaceptable un triunfo electoral del Partido Popular que lidera Mariano Rajoy.

En esta pugna electoral, muy centrada en las grandes opciones de ámbito estatal, Unitat y Esquerra Unida-Els Verds tienen claras dificultades para poderse hacer un hueco electoral a pesar de que la formación que encabeza Pere Sampol registra una evolución positiva a medida que avanza la campaña electoral.

Todo indica, por tanto, que sin vaticinarse un vuelco durante los próximos días -nunca son descartables las sorpresas hasta el último momento-, las diferencias entre las grandes formaciones políticas acabarán ajustándose con diferencias mínimas; razón por la que el debate de mañana entre Zapatero y Rajoy o los apoyos mediáticos que logran recabar el PSOE y el PP, respectivamente, acaben siendo definitorios sobre el voto de los ciudadanos.