Tres décadas de lucha obrera

El sindicato nació a finales del año 1977, «en la efervescencia del final de la dictadura», y, por tanto, su andadura ha sido paralela a la democracia española, recordaron ayer la secretaria general del STEI-i, Neus Santaner, y la regidora de Cultura, Patrimoni i Política Lingüística del Ajuntament de Palma, Nanda Ramon, en la presentación de una muestra que, «si bien conmemora la historia pasada, se titula 30 anys creant futur porque el futuro es lo primero», reconoció Santaner.

La muestra, añadió, «quiere ser un recorrido a lo largo de esas tres décadas de sindicalismo, de las cuales el bagaje más importante que hemos acumulado es el humano». A través de paneles, la proyección de un vídeo, la exposición de fotos y actas originales, de carteles o material editado para diversas campañas, el observador se hace una buena idea del compromiso de esta organización, sin la que hoy no conoceríamos la enseñanza balear tal y como es.

Pero, como bien recordó su máxima responsable, «la lucha no acaba nunca» y hoy los retos siguen siendo muchos y de calado, «como la mejora de la financiación de la enseñanza o de las condiciones de trabajo de las escuelas que cuentan con alumnos de quince nacionalidades distintas en sus aulas».

Treinta años de existencia han dado de sí mucho más, y junto a su labor reivindicativa y de negociación en el terreno docente de las Islas, en el que el STEI-i es el sindicato de referencia, en los últimos años ha abierto el campo de acción a otros sectores, como el sanitario. Y desde siempre, recordó Ramon, sin dejar atrás «su lucha por la normalización lingüística, la igualdad de género o el compromiso con la cooperación y el desarrollo de los países pobres».