Si la venta de buñuelos fritos ya anuncia la cercanía de la festividad de las Vírgenes, una rondalla, la del Judo Club Palma, está ya ensayando las canciones con las que rondará a las niñas y jóvenes cuando llegue la fecha, como manda la tradición.
La mañana del sábado y los martes son los días en los que se reúnen un grupo de amigos, veteranos ya de muchas batallas empresariales, para practicar un poco de judo y luego proceder a los ensayos de la rondalla, no sin antes haber dado buena cuenta de un copioso berenar a base de productos mallorquines y ensaimada, regados con vinos españoles y cava catalán, con delicioso café elaborado por Jordi Boixó y rebentat, por aquello de animarse para el cante.
La noche del día 20 de octubre la rondalla del Judo Club Palma saldrá de ronda con un amplio repertorio. Uno de los solistas del grupo, Pedro Cladera, señaló que «las canciones de ronda que ensayamos son Las mañanitas, Clavelitos, La aurora, Las cintas de mi capa y Abre el balcón». Jordi Massana, otro de los solistas, indicó que también llevaban en el repertorio habaneras, como El meu avi, La bella Lola, La Paloma y Rosina, además de canciones menorquinas muy hermosas tales como Mare vull ser pescador y Na Nena, donde puede lucirse nuestro flautista Federico Marín.
Esta rondalla viajó a tierras catalanas el pasado verano coincidiendo con la 42 Cantada d'Havaneres de Calella de Palafrugell y cumplieron su ilusión de cantar la canción El cañón de Palamós, en el pueblo de Palamós, en el transcurso de una mágica noche junto al renombrado cañón.
Amalia Estabén
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