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Desde primera hora dela mañana, comenzaron las actividades previstas en el programa con motivo de la décima diada de los Castellers de Mallorca. La plaça Major acogió diversos talleres para niños, con dibujos para colorear y juegos con los que muchos se animaron a participar. Tras la animación infantil, la actuación de ball pagès del grupo folklórico Sant Josep de Talaia acaparó la atención de turistas y transeúntes que disfrutaron de las representaciones más populares. Por su parte, desde la plaça d'Espanya salió un pasacalles compuesto de demonios, gigantes, cabezudos y xeremiers animaron el ambiente por las principales calles del centro hasta llegar a la plaça de Cort. Y, precisamente frente al Ajuntament de Palma, por la tarde, se celebró una amplia exhibición de las colles. Xics de Granollers, Al·lots de Llevant y los Castellers de Mallorca hicieron las delícias de un público que vivió los emocionantes castillos humanos. En algunos de los más espectaculares castillos, los más pequeños llegaron hasta el balcón del Ajuntament donde se encontraba la alcaldesa de Palma, Aina Calvo. Tras las actuaciones, Calvo hizo entrega, en uno de los salones de la Casa Consistorial de unos obsequios y recuerdos a las colles participantes. Muchos curiosos y simpatizantes aprovecharon el puesto de venta de camisetas, sombreros, pañuelos, etc de castellers para adquirir algunas de las típicas prendas. Para finalizar la diada, en Ses Voltes se realizó una ballada popular a cargo de Música Nostra, donde más de uno se animó a seguir el ritmo de la música. Wonderbrass clausuró con un gran concierto el completo programa. En definitiva una diada que cada año cuenta con mayor participación y público.