La primera de las tres grandes ferias turísticas internacionales, la World Travel Market (WTM), inicia hoy su andadura en medio de un clima de pesimismo generalizado en el sector turístico y hotelero, dadas las previsiones económicas que hay para el próximo año en el Reino Unido, que no son nada optimistas, y el efecto que ello pueda tener en el segundo mercado emisor turístico en Balears, después del alemán.
Tras la feria de Londres, Fitur y la ITB de Berlín, serán las siguientes citas, pero la WTM es, sin duda alguna, el primer punto de encuentro de toda la industria turística mundial para pulsar la opinión de los grandes grupos turísticos y touroperadores.
La Federación Hotelera de Mallorca, así como Ashome y la patronal hotelera de Eivissa-Formentera, coinciden en subrayar las «incógnitas» que existen en este momento en torno a la evolución de las ventas de reservas para la temporada de verano 2009.
El pesimismo es generalizado, más aún cuando las cifras del turismo británico hacia Mallorca, Menorca y Eivissa-Formentera han sido ligeramente negativas durante 2008 por la recesión económica y las cifras del paro en el Reino Unido. Los hoteleros han perdido rentabilidad y no quieren hablar de más ofertas. Lo único que buscan son las reservas anticipadas, pero desconfían de la estrategia de los touroperadores.
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