Después de un período de vacas flacas, los comercios quieren dar salida al exceso de género que ha quedado en los almacenes por el parón del consumo y prometen grandes descuentos desde el inicio de la temporada de rebajas, que se extenderá durante dos meses hasta el día 7 de marzo. Por otra parte, la mala campaña de Navidad hace pensar que muchos consumidores han esperado a este período para gastar con más juicio y justo en aquello más necesario.
«Serán unas rebajas muy agresivas, como ya lo fueron las de este pasado verano», asegura Antoni Sánchez, responsable de comunicación de El Corte Inglés. «¿Qué quiere decir agresivas? Pues que habrá descuentos «de más del 50% desde el primer día prácticamente», explica.
De la misma opinión es Tomeu Servera, presidente de Afedeco, quien a pesar de aclarar que «en esta época de incertidumbre que vivimos es imposible hacer predicciones», ve claro que la falta de consumo «obligará los comercios a sacar grandes stocks de productos».
Otro factor que favorecerá las compras, aparte del económico, será la llegada del frío, que este año ha llegado antes que el año pasado y eso favorecerá a las ventas de ropa de invierno. Pero el obstáculo más importante, hoy por hoy, es la crisis psicológica, según Bernat Coll, presidente de Pimeco, quien alerta de la existencia de una psicosis colectiva que frena el gasto. «Han dejado de comprar, incluso, las familias que no sufren la crisis directamente», explica Coll.
Por otro lado, desde la Direcció General de Consum se aconsejó ayer a los ciudadanos que durante el período de rebajas salgan con una lista de compra y «no abusen» de las tarjetas de crédito, con el fin de hacer un consumo «responsable» en el que «se equilibren las necesidades con el propio presupuesto».
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